Presentan libro sobre “fraudes panistas”.

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En las administraciones del ex presidente Vicente Fox y del actual jefe del Ejecutivo, Felipe Calderón, se han tolerado y facilitado negocios ilegales ejecutados por militantes blanquiazules y diversos empresarios del país, para beneficiarse económicamente de Petróleos Mexicanos, aseguró Ana Lilia Pérez, autora del libro Camisas azules, manos negras. El saqueo de Pemex desde Los Pinos.

En entrevista, la periodista explicó que mediante investigaciones que elaboró durante nueve años, “logré ubicar los negocios familiares o de amistad” que realizaron “hombres que fueron o son muy cercanos a los presidentes panistas”.

Vicente Fox, Martha Sahagún y sus hijos Manuel y Jorge Bribiesca, Felipe Calderón, César Nava, Juan Camilo Mouriño, Juan Bueno torio, Jorge Nordhausen, Diego Fernández de Cevallos y Jesús Reyes Heroles, son algunos de los nombres que señaló como beneficiarios “directos o indirectos” de negocios en Petróleos Mexicanos.

Ana Lilia dijo que el texto presenta en sus páginas los cabildeos “fuera de la ley” entre políticos mexicanos y empresas transnacionales. Además, los “fraudes” a través de los cuales se amasaron grandes fortunas con recursos públicos.

Los funcionarios van escalando “gracias a prebendas”, dijo, “muchas veces ilegales o con ayuda de amigos en el gobierno o en la administración federal”. Algunos, “suben tan alto que llegan a ser dirigentes de partido o hasta secretarios de Gobernación”, comentó.

Huyó del país

César Nava, el actual presidente del blanquiazul, dijo, es uno de los casos expuestos en el libro editado por Grijalbo. “Hizo estragos durante los pocos años que estuvo en la paraestatal, él y sus amiguitos yuppies con los que llegó”, explicó.

Pemex, dice, ha sido “una historia de traiciones” entre directivos de la empresa nacional y funcionarios federales. Juan Camilo Mouriño, ex secretario de Gobernación, “fue uno los que obtuvieron jugosos beneficios para su familia” cuando era funcionario público.

También los administradores de Pemex se vieron inmiscuidos, Federico Reyes Heroles, director de la paraestatal entre 2006 y 2009, era “un hombre ambicioso, que buscaba el control de la petrolera para beneficio de los intereses que representaba.

Dijo que debido a las investigaciones que hizo fue víctima de “acoso judicial” y se vio forzada a abandonar el país dos veces. En Pemex, “lo que está en juego es el control de la empresa más importante del país”.

Consideró que la publicación del material sobre “las mafias” de la paraestatal permitirá ventilar “el mal desempeño de la función pública, porque el fraude sigue y sólo cambian los nombres”.