La ciencia ni aburre ni está lejos de jóvenes.

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Son 65 mexicanos y no tienen más de 18 años. Ellos vinieron a ganar y con su éxito han echado abajo una de las teorías del imaginario colectivo en México, especialmente aquella que acusa el retraso del país por una suerte de envidia entre sus habitantes ante el progreso del otro.

Esa versión, que para los jóvenes ya resulta arcaica, compara a los mexicanos con cangrejos en cautiverio y dice que, al primer intento de uno de los crustáceos en salir, los demás rodean al osado, y antes que festejarlo o imitarlo por su escape, las tenazas lo atrapan para no dejarlo sobresalir del resto.

No, aquí, al campeonato anual de FIRST (For Inspiration & Recognition of Science and Technology) los jóvenes estudiantes de preparatoria, provenientes de dos equipos, uno de la Universidad Panamericana (UP) y otro del Tec Monterrey Metepec, unieron sus talentos para lograr dos de los 25 premios que se otorgan en la competencia de robótica, donde participaron 344 equipos de seis países: Australia, Brasil, Canadá, Israel, México y Estados Unidos.

México también puede

El Rookie Inspiration Award, premio al novato por el mayor esfuerzo para acercar a los estudiantes a temas de ingeniería, lo obtuvo el equipo del Tec de Monterrey de Metepec llamado Tecbot. Este grupo conformado por 50 estudiantes, la mitad de ellos mujeres, participa por primera vez en el FIRST, organización no lucrativa fundada en 1989 por Dean Kamen, que ofrece programas que motivan a los jóvenes a perseguir oportunidades en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, mientras desarrollan habilidades para el futuro.

El Team Spirit Award, premio por extraordinario entusiasmo, espíritu de compañerismo y trabajo en conjunto, fue otorgado a Las Panteras, equipo de la UP conformado por 15 estudiantes, que por cuarto año consecutivo participa en este tipo de eventos.

Asesorados por ingenieros voluntarios de General Motors (GM), llamados mentores, los dos equipos debieron superar competencias regionales en Estados Unidos y armar en sólo seis semanas un robot con material de FIRST.

La experiencia como ganancia

Georgia Dome fue la sede para el encuentro internacional, cuyo objetivo era meter goles para probar capacidad y control del robot y del equipo.

Y aunque ni la UP, ni el Tec de Monterrey de Metepec lograron calificar por la máxima anotación de goles, ambos fueron reconocidos por su labor grupal. Y es que en esta justa los jueces califican aspectos de ingeniería, diseño, creatividad, innovación y desempeño de los robots, así como negocios de equipo, publicidad y sustentabilidad, ayuda a la comunidad y promoción de valores de FIRST.

La organización en ambos equipos fue planeada de manera estratégica, casi como una microempresa. Debieron repartirse el trabajo, unos fueron responsables de patrocinios para el viaje o diseñar la comunicación y publicidad y otros, de armar y programar el robot.

Carlos Augusto Martínez Castañeda, asesor de GM, evalúa la actuación de los chicos. “No son perdedores, su actuación fue muy buena, lo cierto es que para alcanzar los primeros lugares en campeonatos como éste falta mayor difusión de FIRST en México”.

Más allá de los premios obtenidos, según Martínez Castañeda, logran experiencia y una actitud diferente ante la vida. “Las ventanas de posibilidad y de conocimiento del mundo se amplían, pues los chicos además de hacer a un lado el miedo por las áreas de ingeniería, entran en contacto con otros jóvenes de diversos países, así como con los representantes de empresas a nivel mundial”.

Ciencia no es igual a aburrimiento

Algunos jóvenes que no han definido aún la carrera estudiar, se han lanzado a la aventura de desmitificar la ciencia y la tecnología como un asunto aburrido y reservado a unos sectores. “Con nuestra participación en este evento queremos demostrar que cualquier opinión que señale a la ingeniería y las matemáticas como reservadas a los cerebritos está lejos de ser cierto. En este proyecto están involucrados jóvenes que no saben aún cuál será su profesión en el futuro”, dice Sebastián Montes estudiante de la UP.

Sebastián tiene 18 años y desde los 13 ha participado en competencias internacionales. Cuando era niño acudió a FIRST Lego y hoy luego de cinco años ya es mentor de niños. ”Los asesoro y hago que vean con diversión cualquier área que tenga que ver con la ingeniería y las matemáticas”, dice.

Las mujeres ganan lugares

El equipo Tecbot reunió a 25 mujeres interesadas en ciencia y tecnología. Daniela Gómez, Diana Ahumada y Samantha Carmona, de 18, 17 y 16 años, son algunas de las jóvenes que incluso han asistido a conferencias dictadas por otras mujeres donde les hablan de la relación que guarda la mujer con la ingeniaría y también con su entorno social.

“Nos han dicho que debe existir un balance entre el trabajo y la familia, nos han asegurado también que es posible lograrlo”, dice Daniela, a quien le tocó junto con Héctor Curi, controlar el robot en una de las más de seis competencias.

Necesario el respaldo

El entusiasmo de los chicos para participar en este tipo de competencias no sólo viene de la emoción propia de su edad. Además de que GM provee nueve asesores, seis para el Tecbot y tres para Panteras, otras empresas y diversos niveles de gobierno han apoyado la iniciativa.

“Hay que mostrarles a los chicos que la posibilidad de sobresalir en México no se basa en ser narcotraficante, pues los triunfos se alcanzan con trabajo, organización y disciplina”, asegura David Rojas, director de ingeniería de GM.

Para abrir el camino hacia esas oportunidades, Bárbara Gómez, directora de FIRST México, pretende que en 2012 México sea sede de un campeonato regional con equipos de América Latina.

Sabe que tendrá que contactar a los representantes en México de las empresas que hoy respaldan la competencia en Estados Unidos, ya Google dispuso un mentor para el equipo de la UP.

“Hay que considerar que las estadísticas de FIRST señalan que 90% de los participantes en este encuentro han optado por profesiones relacionadas con la ciencia y la tecnología”, dice Gómez.