Noticia:
El caso de las indígenas Alberta Alcántara Juan y Teresa González Cornelio muestra una triple discriminación: contra mujeres, contra mujeres indígenas y contra mujeres pobres, sostuvo la representante adjunta en México de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Liliana Valiña.
Lamentó que México mantiene el reto de eliminar la discriminación y que el sistema de justicia nacional tenga como desafío investigar y resolver casos en los que mujeres están involucradas.
La representante del organismo internacional se reunió ayer, a propósito del Día Internacional de la Mujer, con Alberta y Teresa dentro del Centro de Readaptación Social (Cereso) de San José El Alto, en donde purgan una condena de 21 años de prisión.
Sentencia desproporcionada
Ambas, junto con Jacinta Francisco Marcial —quien ya obtuvo su libertad— fueron acusadas de haber participado en el secuestro de seis elementos de la Agencia Federal de Investigación. Durante hora y media, las dos internas platicaron con Valiña y con el presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), Adolfo Ortega Osorio.
Valiña y Ortega coincidieron en advertir discriminación en contra de Alberta y Teresa durante su proceso legal, y en consecuencia, en la necesidad de que se haga justicia a la brevedad.
Sobre la sentencia, Valiña la calificó de desproporcionada, y recordó que en derechos humanos y en derecho penal hay un principio que se vincula con la proporcionalidad. “Evidentemente llama mucho la atención el rigor de una condena de 21 años a dos mujeres indígenas, en casos en donde —tenemos entendido— no se han registrado lesiones, muerte de personas, o sea, circunstancias o consecuencias muy graves que pudieran ayudar a entender porqué han recibido una sentencia tan rigurosa”.
Resolución en marzo
Acusó que en el sistema judicial actual, cuando las mujeres son víctimas, “los casos en general no dan resultados; mujeres víctimas de violencia doméstica, mujeres víctimas de otro tipo de violencia, mujeres víctimas de abuso sexuales… esos casos no avanzan”.
No obstante, expresó su esperanza en que el sistema judicial “muestre su capacidad de actuar de manera autónoma, independiente y de aplicar la ley de manera rigurosa pero al mismo tiempo, con el respeto de los derechos humanos”.
Los abogados defensores de Alberta y Teresa, adscritos al Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez apelaron la sentencia, por lo que el caso es revisado por un juez del Tribunal Unitario de Circuito, quien habrá de resolver, a más tardar, a finales de marzo.
Liliana Valiña pidió a la justicia mexicana evitar “la discriminación, asegurando que la justicia otorgue todas las garantías individuales y el derecho de defensa y la posibilidad de escuchar a las mujeres que han sido condenadas, para que también puedan dar su versión y la justicia pueda considerarla”.
Coronavirus, la amenaza esta ahí afuera
Hace 4 años
No hay comentarios:
Publicar un comentario