Francia sugiere toque de queda para jóvenes delincuentes.

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La propuesta gubernamental de establecer un toque de queda por la noche que se aplicaría a los menores de 13 años condenados por un acto de delincuencia en Francia generó hoy una fuerte polémica a las pocas horas de haberse lanzado.

El ministro del Interior, Brice Hortefeux, fue quien sugirió anoche delante de responsables de la mayoría conservadora prohibir a los menores de 13 años que hayan cometido algún delito salir a la calle por la noche, salvo si van acompañados por un adulto.

Hortefeux lo justificó por el fuerte incremento de la delincuencia de adolescentes, que ha sido cercana al 5 por ciento en un año, de forma que los menores de 18 años totalizan el 18% de los delitos, con una tendencia además a una mayor violencia y a la aparición de armas blancas y "letales".

"¿Es normal que un menor de 12 ó 13 años que ya ha cometido delitos pueda pasear solo de noche?", se preguntó retóricamente antes de contestar que eso "alimenta las bandas, la violencia y el tráfico de droga".

El responsable de Interior hizo notar que las chicas cada vez están mas implicadas en actos de violencia, y que en su caso la subida en el último año fue del 10 por ciento.

Hortefeux se esforzó en insistir en que la idea no es "una decisión", sino "una reflexión", pero en cualquier caso las respuestas no han tardado en llegar, y así la primera secretaria del Partido Socialista, Martine Aubry, la descalificó y cargó contra el ministro, que a su juicio con su propuesta "se ríe de la gente".

Aubry, entrevistada en la emisora de radio "RTL", señaló con ironía que el toque de queda "no sería más que el vigésimo tercer texto del Gobierno sobre la seguridad" desde 2002, con lo que intenta dar la impresión que "cada vez que hay un problema basta con votar una ley para que cambie".

A juicio de la jefa de los socialistas, hay una contradicción tras los anuncios del Ejecutivo de reducir "varios miles" de puestos de policías y gendarmes.

También se pronunció en favor de restituir la "policía de proximidad", una especie de agentes de barrio, que deberían ocuparse de reunirse con las familias y convocarlas cuando se produzcan atentados al civismo.

El secretario general del principal sindicato de policía, Nicolas Conte, aun reconociendo el problema emergente de la delincuencia juvenil, dijo no saber cómo se podría aplicar una medida como la propuesta por el titular de Interior.

"Prohibirles salir por la noche no creo que les cause gran impresión" a los miembros de bandas juveniles, consideró Conte en una entrevista a la emisora "France Info", que añadió que la delincuencia tiene mucho que ver con la situación de familias desestructuradas que tampoco podrían hacer cumplir el toque de queda.

El responsable sindical añadió que el dispositivo "sería totalmente inaplicable" por los policías, máxime "en un momento en que el Gobierno lleva a cabo una política de reducción de efectivos".

"A un menor delincuente no se le reconoce" y entonces haría falta que la policía dispusiera de elementos para poder verificar que los menores que tienen prohibido salir por la noche están en casa.

El toque de queda para menores se puso en práctica de forma temporal en algunos municipios durante los disturbios que se desencadenaron en Francia en el otoño de 2005.