China condena a 198 por revuelta en Xinjiang.

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China ha condenado a 198 personas implicadas en 97 casos relacionados con los disturbios de hace ocho meses en la región autónoma uigur de Xinjiang (noroeste del país), informó hoy Nur Berkri, presidente del gobierno regional, en unas declaraciones recogidas por la agencia oficial Xinhua.

"La cifra final de las personas condenadas será más alta", aseguró Nur durante una conferencia de prensa dentro la sesión anual de la Asamblea Popular Nacional (APN, Legislativo).

Nur agregó que "China es un país socialista regido por la ley y la dignidad de esta ley no permite su violación".

Además, apuntó que "cualquier actividad delictiva que dañe el orden social será castigado por la ley".

Cerca de 200 personas, en su mayoría de etnia han, murieron en los disturbios del pasado 5 de julio, desencadenados por el linchamiento de trabajadores uigures días antes en una fábrica de Cantón (sur del país).

Grupos de uigures en el exilio, que no niegan que miembros de su etnia iniciaron la violencia, acusan al Ejército chino de haber reprimido de forma sangrienta las revueltas, de ocultar a los muertos uigures y de llevar a cabo detenciones y juicios sin garantías legales.

Sin embargo, Pekín acusa a estos grupos exiliados, y a su líder, Rebiya Kadeer, de ser independentistas e incluso de tener vínculos con el terrorismo islámico, un extremo que nunca ha sido probado.

Los uigures, una etnia turcomana de religión musulmana que habita Xinjiang desde hace siglos, culpa al gobierno chino de discriminación y de intentar acabar con su cultura a través de sus políticas étnicas y del envío masivo de colonos chinos a la región en las últimas décadas.