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Telefónica (Movistar) aprieta el paso para ganar terreno a sus rivales Telmex y América Móvil en México. La española decidió entrar al mercado de la telefonía pública, pero con un esquema que le permitirá nutrir su negocio móvil.
Adicional a los servicios tradicionales para hacer llamadas locales y de larga distancia, en los equipos de Telefónica es posible hacer recargas electrónicas para teléfonos celulares Movistar e incluso enviar mensajes de texto (SMS por sus siglas en inglés).
Son teléfonos que funcionan con monedas de uno, 2, 5 y 10 pesos, y las recargas electrónicas pueden ser desde 10 hasta 500 pesos.
La estrategia de la firma española es que sus teléfonos públicos se ubiquen en micro y pequeños negocios, como tienditas, farmacias, supermercados o sitios de alta afluencia.
El concepto es ofrecer accesos públicos multifuncionales, con tecnología GSM, para proveer servicios de telecomunicaciones y de valor agregado.
Telefónica detalló que estos servicios están dirigidos a la población que no tiene una línea telefónica propia, saldo en su teléfono celular o bien que desea controlar su gasto en telefonía.
El modelo de negocios de la empresa española se divide en la colocación de los teléfonos a través de distribuidores autorizados o de permisionarios del servicio de telefonía pública.
Para ser distribuidor, se requiere una compra mínima de 25 aparatos, lo cual implica una inversión de alrededor de 15 mil dólares.
Analistas en telecomunicaciones comentaron que a raíz del aumento de entre 4% y 5% en el precio de la telefonía celular, generado por las nuevas cargas fiscales vigentes a partir de este año, los consumidores mexicanos preferirán llamar desde un teléfono público, ya que este servicio está exento del impuesto a las telecomunicaciones de 3%.
La expectativa es que se reduzca el consumo en celulares y que los usuarios prefieran tener ahorros a través del uso de las casetas públicas, que ahora tienen la modalidad de realizar una llamada con una tarifa plana por tiempo ilimitado, lo que hace más atractivo al usuario el servicio público.
Telmex con llamadas por cobrar
Teléfonos de México (Telmex) no deja de lado su negocio en telefonía pública e introdujo un servicio por el cual también nutre su división de telefonía local, pues aunque el usuario no tenga una tarjeta Ladatel podrá comunicarse a una línea telefónica de esta misma empresa mediante la opción de marcar *333 desde cualquier caseta telefónica para hacer una llamada por cobrar, por lo que el receptor de la comunicación absorbe el costo.
Este esquema está vigente en larga distancia, pero ahora funciona en llamadas locales y el cobro se hace a través del recibo telefónico, por lo que el propietario de la línea debe dar de alta el servicio.
Telmex es la única compañía telefónica que cuenta con esta opción, pues el resto de los operadores de telefonía pública mantienen el esquema de pago con monedas para hacer las llamadas.
La empresa de Carlos Slim es la única que ofrece el servicio de telefonía pública a través de una tarjeta de chip, y ante el descenso en el uso del servicio por la masificación de los teléfonos celulares, la compañía decidió hacer cambios en sus tarifas.
Luego de casi nueve años de cobrar un peso por minuto en cada llamada local, en 2008 Teléfonos de México actualizó la tarifa y ahora tiene una tarifa de tres pesos sin límite de tiempo.
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