Noticia:
A la ex hacienda “La Barranca”, en el vecino Querétaro, le hacía falta algo: un bosque de nogales. La empresa Vivero Siempre Verde se dio a la tarea de subsanar la falla: con tecnología de punta, trasplantó una decena de árboles de una huerta en Guanajuato a la finca con más de 50 habitaciones y 15 caballerizas, propiedad de Diego Fernández de Cevallos.
Teobaldo Santos, uno de los dueños de la huerta, dice que la empresa le entregó mil pesos por dejarlos trabajar en su terreno y “por algunos árboles de durazno”, pero los vehículos pesados terminaron por destruir su milpa, su calabaza y alfalfa.
Diana Karina Hernández, secretaria del ayuntamiento de Apaseo el Alto, dice que “es un hecho ilegal porque no hay permisos federales, estatales o municipales”.
Ofrezco mis servicios.
viernes, 13 de noviembre de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario