CEESP: se pagan aquí impuestos muy altos.

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Las empresas que cotizan en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) pagan más impuestos sobre ingresos que sus similares de Brasil y España, aunque por debajo de los corporativos con acciones en el mercado bursátil de Nueva York, subraya el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) en su “Análisis Económico Ejecutivo” de esta semana.

La evaluación del CEESP se desprende de las acusaciones mutuas entre la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), que la semana pasada enfrentaron a ambas entidades en referencia al pago de impuestos de las personas morales.

Tras las discrepancias suscitadas, la evaluación del CEESP “indica que las empresas en México pagan sus impuestos en función de lo que marca la ley, y es factible que dada la estabilidad que se espera para el tipo de cambio el próximo año, estos resultados mejoren”, de acuerdo con el “Análisis Económico Ejecutivo” del organismo.

Este informe señala que los consorcios registrados en BMV pagan 4.32% de Impuesto sobre la Renta (ISR) sobre ingresos netos.

En cambio, las empresas que cotizan en el mercado de España tributan 3.91% y en el de Brasil erogan sólo 2.15%. En el mercado bursátil de la ciudad de Nueva York el pago de impuestos llega a 5.24%.

Cuando se analiza el pago de impuestos conforme a utilidades, que es la medida socorrida por la Secretaría de Hacienda, las empresas en México pagan 26.9%, lo que está muy cerca de 28% que hoy marca la ley.

Sin embargo, según el CEESP, se necesita un esquema tributario sencillo con un solo impuesto para que las personas morales cumplan plenamente con lo que el gobierno demanda. Pero la Ley de Ingresos 2010 quedó lejos de generar este esquema.

Además de refrendar la inconformidad por los cambios fiscales aprobados para el próximo año por el Congreso, el CEESP advierte que la nueva regulación puede generar que la recaudación disminuya.

Ante un pobre crecimiento económico, las personas físicas y morales podrían ser incapaces de pagar los impuestos que demanda el Estado.

En específico, las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) enfrentarán un escenario complejo, apunta la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) a través de la publicación mensual Pulso Industrial.

Los problemas serán ocasionados tanto por el nuevo esquema fiscal como por la incapacidad inherente de muchos micro, pequeños y medianos empresarios por dominar las capacidades administrativas y financieras que permitan a sus negocios sobrevivir, dice la Concamin.

De las 300 mil mipymes que inician operaciones cada año en México, sólo la mitad sobreviven en el sector formal de la economía tras un año de servicios. El resto desaparece o se incorpora al sector informal, destaca la cámara de los industriales.

Incluso, tras cinco años de operación, las mipymes que sobrevivieron a los primeros 12 meses también habrán desaparecido, advierte.