Se unen contra el decreto.

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Miles de hombres, mujeres y niños marcharon durante más de cuatro horas en apoyo al Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) que exige la derogación del decreto de extinción de Luz y Fuerza del Centro (LyFC), la salida de la Policía Federal de sus instalaciones y una mesa de diálogo para solucionar el conflicto. Esto último, consideraron como el primer logro de la movilización.

Las dirigencias del SME y de otras organizaciones sindicales que participaron en la protesta, como el STUNAM y el de Telefonistas, consideraron que esta marcha “rebasó” las expectativas al reunir a unas 300 mil personas (según los organizadores) y se mostró la fuerza de la sociedad y su descontento.

En la movilización que duró más de cuatro horas y que aún acabado el mitin en el Zócalo, la retaguardia caminaba por Reforma, participaron desde organizaciones sindicales, políticas de izquierda y populares hasta estudiantes, académicos y familiares de los electricistas, quienes expresaron su rechazo al decreto y repudio al gobierno de Felipe Calderón con pancartas, mantas, lonas y gritos.

Avanzaron por Paseo de la Reforma, avenida Juárez, Francisco I. Madero y 5 de Mayo, con figuras fúnebres que iban desde calaveras hasta cruces con figuras tétricas y ataúdes.

Participaron personajes de la políticacomo Andrés Manuel López Obrador, quien caminó en la retaguardia; y en la vanguardia, los perredistas Rosario Ibarra, Graco Ramírez y los petistas Porfirio Muñoz Ledo, Gerardo Fernández Noroña y Jaime Cárdenas.

La mayoría de los manifestantes del Sindicato Mexicano de Electricistas vestían con playeras rojas, otros disfrazados de luchadores, y algunos más de funcionarios públicos ridiculizando a Felipe Calderón y los secretarios del Trabajo, Javier Lozano, y de Hacienda, Agustín Carstens.

Mientras continuaba llegando gente a la Plaza de la Constitución, se desarrollaba el mitin, cuya lista de oradores la comenzó el dirigente de la Alianza de Tranviarios de México, Benito Bahena, y le siguieron, entre otros, el legislador Muñoz Ledo; el dirigente de los trabajadores de la UNAM, Agustín Rodríguez, y el de los telefonistas, Francisco Hernández Juárez, así como Claudia Sheinbaum Pardo integrante movimiento que encabeza Andrés Manuel López Obrador.

Piden mediación del GDF

El último orador fue el líder del SME, Martín Esparza Flores, quien anunció que el gobierno federal aceptó iniciar el diálogo a partir de hoy y pidió que el intermediario sea el jefe de gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard.

Pese al inicio de pláticas, llamó a los trabajadores a continuar la resistencia.

“Vamos a pedir que intervenga el jefe de Gobierno, porque el principal usuario que tiene Luz y Fuerza es la ciudad de México y hay que hacer una alianza: la ciudad de México con los electricistas del SME para tener calidad en el servicio, eficacia, pero también una tarifa que se pueda pagar.

“Y cobrar también a todos los industriales, los grandes consumidores, a explotar la fibra óptica para que la sociedad de la información tenga el servicio de internet, telefonía, televisión, con la alianza de todos, hay proyecto, hay alternativas y esa es la condición, que entre el jefe de Gobierno a las mesas de negociaciones”, refirió el líder de los electricistas.

Exigió la salida de la Policía Federal y del Ejército de los centros de trabajo de Luz y Fuerza del Centro y que se reincorporen a todos los trabajadores a sus actividades. A cambio, el dirigente comprometió a electricistas a que sea más rentable la empresa.

Aclaró que es un movimiento “pacífico pero con coraje” que no estará dispuesto a que se siga explotando la mano de obra calificada. Llamó a impulsar la instauración de contratos colectivos para todos los gremios del país similar al del sindicato de electricistas.

“Nos tienen que regresar la empresa, el empleo, el Contrato Colectivo de Trabajo y sobre todo la dignidad del SME”, dijo el líder sindical, y criticó las diferencias salariales entre los trabajadores y los directivos de la paraestatal.

Catalizador del descontento nacional

Antes, en una visita que hizo a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Martín Esparza señaló que la marcha se convertiría en un “catalizador del descontento nacional”.

Además de advertir que el movimiento de los trabajadores electricistas “va a estallar algo de fatales consecuencias para la economía”, refirió al concluir su encuentro con los estudiantes, en el auditorio Ho Chi Min.

Los estudiantes, académicos y trabajadores de las instituciones de educación superior también manifestaron su apoyo a los trabajadores electricistas. Entre bailes, batucada, mambo y carreras caminaron en paralelo a los electricistas estudiantes de la UNAM, el Instituto Politécnico Nacional (IPN) y las universidades Pedagógica Nacional, las autónomas Metropolitana y de la ciudad de México.

En el mitin del Zócalo, Porfirio Muñoz Ledo sostuvo que la torpeza del gobierno federal ha hecho volver a los sindicatos al centro de la arena política nacional.

Subrayó que el presidente Felipe Calderón se asemeja al español Francisco Franco, porque, entre otras cosas, alienta a las clases medias contra los trabajadores y violenta la Constitución.

Muñoz Ledo resaltó que se debe pedir la salida de Felipe Calderón de la presidencia de la República y planteó una huelga nacional.

En este contexto, Agustín Rodríguez, sostuvo que sólo a través de la unidad de todos los trabajadores y de la huelga nacional se podrá echar para atrás ese “decreto maldito” de extinción de Luz y Fuerza del Centro.

Benito Bahena planteó un decreto popular por la renuncia del presidente Felipe Calderón.

Francisco Hernández Juárez, llamó a ya no votar por el PAN y coincidió con la lopezobradorista Claudia Sheinbaum en que el decreto para extinguir a la paraestatal es ilegal y anticonstitucional.

Durante la marcha, entre las consignas que más llamaron la atención fueron las que lanzaron los jóvenes del Instituto Politécnico Nacional al cantar:

“Porque el Poli no es panista, porque es comunista que me anoten en la lista”, pero también atrajeron miradas grupos de jóvenes que se insertaron entre las escuelas que Biológicas, Ingeniería y Contaduría y que portaban jersey distintivos de los grupos porriles.

Se pudo observar que después de la afluencia de trabajadores electricistas el grupo más nutrido fue el que distribuyó la UNAM con su sindicato de trabajadores y estudiantes de facultades como de Ciencias Políticas y Sociales, Filosofía y Letras, Economía, de las sedes foráneas a Ciudad Universitaria y preparatorias.

También se sumó un contingente de maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) que además de adherirse a las protestas de los electricistas incorporó sus propias demandas en la movilización.

La sección 22 de Oaxaca ratificó su demanda de juicio político al gobernador Ulises Ruiz y el retiro del fuero a tres ex funcionarios del gobierno local, ya que ahora son diputados federales.

Una vez que cayó la noche, los últimos contingentes SME transformaron algunas pancartas en antorchas.

Bajo la luz del fuego, los trabajadores encendieron lo que antes eran consignas por escrito en contra del gobierno federal y al llegar al cruce de Balderas y avenida Juárez, hicieron un alto para entonar el Himno Nacional.

Con el puño izquierdo levantado, los electricistas contagiaron a los curiosos y algunos oficinistas y trabajadores que en ese momento buscaban transporte en las diferentes estaciones del Metro.