Imparable, asesinatos de mujeres.

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A 69 días de que termine el presente año, el número de homicidios dolosos contra mujeres es equiparable a los 161 registrados en 2008, ya que hasta el momento van 156 casos, reconoció Adriana Cabrera Santana, titular de la fiscalía especial para Delitos Dolosos Cometidos contra la Mujer, de la Procuraduría mexiquense.

Admitió que de dichos ilícitos sólo en 38% de los casos se cuenta con una averiguación previa determinada, es decir que la Procuraduría estatal logró detener y presentar ante un juez al presunto responsable del ilícito, precisó la fiscal.

“De estos 156 —asesinatos contra mujeres— 38% tiene averiguaciones previas determinadas, pues ya está consignado el o los presuntos responsables ante un juzgado”, precisó.

Reconoció que homicidios dolosos contra mujeres se seguirán presentando en territorio estatal, ya que el crecimiento de la población aumenta y los problemas de desintegración familiar también van a la alza.

En este sentido, insistió que la pérdida de valores al interior del núcleo familiar, así como los problemas económicos, entre otros muchos factores, son los que están presentes atrás de un homicidio doloso contra una mujer.

La fiscal precisó que la Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM) sigue siendo donde se registra el mayor número de homicidios dolosos, mientras que en el valle de Toluca, aunque en menor grado, también se registran este tipo de ilícitos.

“La mayoría de los 156 casos que se han registrado han sido en el valle de México, por sus mismas características como es un mayor número de habitantes”, dijo la funcionaria.

Cabe señalar que en 2008 se habían registrado 158 homicidios dolosos, es decir dos casos menos con relación a 2007, año en que se registraron 161 ilícitos de este tipo.

Por último, la fiscal confió en las nuevas facultades que tiene el agente del Ministerio Público de la Procuraduría estatal, que entre otras cosas al detectar signos de violencia y agresiones intrafamiliares contra las mujeres, puede ordenar que se aísle a la posible víctima de un delito de género.