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Guillermo Babatz, presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), consideró que es conveniente “regular” los pagos mínimos en las tarjetas de crédito. Aquellos productos que “eternizan las deudas” con pagos mínimos muy bajos y tasas de interés elevadas son nocivos para el consumidor y “no deben permitirse”, advirtió.
En entrevista, el funcionario mencionó que el análisis de este tema lo realiza el Banco de México. “Creemos que se debe distinguir entre los productos que ya existen y los nuevos que se emitirán, a fin de establecer un periodo de gradualidad”.
No sería justo eliminar o aumentar los mínimos de un día a otro, agregó.
El pago mínimo es una facilidad que ofrecen los bancos de permitir a los usuarios saldar una parte de su adeudo.
Babatz comentó que los programas de reestructuras para tarjetas que aplican las instituciones son “positivas”. Desde hace tiempo, agregó el funcionario, la CNBV conminó a las entidades a la promoción de esquemas de renegociación adecuados.
Responsabilidad compartida
Y a diferencia de lo que ocurre en otros países, el costo de las redocumentaciones las absorben los intermediarios. Con las reestructuras se observó una responsabilidad compartida entre los usuarios y las instituciones.
Hace unos meses, el Congreso de la Unión aprobó disposiciones que encomiendan al Banco de México realizar una redefinición del esquema de los pagos mínimos y ampliar la información a los clientes.
También se obligará a los intermediarios a que precisen, en el estado de cuenta, el tiempo y el costo que les llevará si pagan sólo el mínimo en su crédito.
En la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) consideraron que se debe ser muy cuidadoso en un posible cambio en los pagos mínimos, ya que si éste se eleva, muchas personas podrían dejar de pagar.
La dependencia recalcó que el mejor uso que se le puede dar a una tarjeta de crédito es liquidar el adeudo a la fecha de corte.
Es deseable que los tarjetahabientes sean “totaleros”, es decir, que se eviten los intereses y sólo tengan que pagar la comisión. Y destacó que los pagos “chiquitos” no siempre son la mejor opción.
Un estudio de la Condusef detalló que una persona que recurre a los mínimos puede tardar más de 10 años en saldar su deuda.
A su vez, los bancos mencionaron que los mínimos son una facilidad que se brinda a los usuarios. Aunque las instituciones aclararon que ésta no es la alternativa más recomendable.
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