“Estamos mejor que hace 100 años”

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Con millones de personas volcadas a las calles para el celebrar el bicentenario de la Argentina como nación, la presidenta Cristina Kirchner aseguró ayer que “estamos mejor que hace 100 años”, al tiempo que volvió a reclamar la soberanía argentina sobre la Islas Malvinas.

Acompañada de los presidentes sudamericanos (excepto el colombiano Álvaro Uribe y el peruano Alán García), Kirchner inauguró en la casa de gobierno, la galería de “los Héroes latinoamericanos” con pinturas de cada uno de los hombres y mujeres actores de la historia latinoamericana, entre los que destacan los mexicanos José María Morelos, Benito Juárez y Lázaro Cárdenas, para luego sumarse a la fiesta popular en la Avenida 9 de Julio, acompañada de los mandatarios asistentes al evento.

La presidenta comparó a la Argentina actual con la de 1910, cuando si bien era la octava economía del mundo, el centenario “se celebró en estado de sitio y había represión y no había democracia”, aclaró Kirchner.

Ayer, durante la última de cuatro jornadas históricas en las que los argentinos colmaron las calles del centro de Buenos Aires como no había ocurrido desde el cierre de las campañas políticas en 1983 (con la recuperación de la democracia), el día patrio tuvo dos tedeums religiosos, uno en la catedral metropolitana y otro en la Basílica de Luján, al oeste de Buenos Aires, al que acudieron la jefa de Estado y su esposo y antecesor, Néstor Kirchner.

Al tiempo que en la catedral, en la capital del país, el cardenal primado, Jorge Bergoglio, reclamó “grandeza de los dirigentes para poder superar la confrontación permanente”, en Luján —y delante de la pareja presidencial—, el arzobispo Martín Radrizzani, pidió “superar los partidismos e intereses personales y buscar soluciones superadoras”.

“Estamos en un momento crucial. Tenemos que defender a cualquier costo el bien común y la unidad nacional, pidiéndole perdón al Padre por tantos egoísmos que nos llevaron a luchas fraticidas desde el nacimiento de la nación”, aseguró Radrizzani.

Desfiles, números artísticos, recorridos por los pabellones de los países y de las provincias a lo largo del paseo del bicentenario, sobre la avenida 9 de Julio fueron la razón para que más de 5 millones de personas se volcaran a las calles, impidiendo a su paso el tránsito de vehículos por más de media ciudad.

En la noche, luego del discurso presidencial, la mandataria (ataviada con los colores de la bandera nacional) y sus colegas salieron de la casa de gobierno, atravesaron la histórica Plaza de Mayo hasta el Cabildo, escenario de los sucesos del 25 de mayo de 1810, para presenciar una película en 3D sobre los muros del histórico edificio sobre algunos pasajes de la historia argentina.

De ahí, todos juntos caminaron hasta el palco en la Plaza de Mayo para presenciar el desfile y también un espectáculo del grupo teatral “Fuerza Bruta”, que versaba sobre la historia argentina y que fue el encargado de cerrar la larga fiesta popular para conmemorar los primeros 200 años de Argentina como nación.