UNICEF indaga tráfico de menores en Haití.

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El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) expresó ayer su preocupación por la salida de niños, aparentemente huérfanos, de Haití sin que contaran con la documentación adecuada o sin que se hayan concluido los trámites legales para su adopción. UNICEF explicó que la población infantil haitiana, tras el devastador terremoto del pasado día 12, necesita “recibir asistencia urgente en donde se encuentran, que es Haití”.

“UNICEF tiene información sobre menores que han abandonado el país (Haití) sin que se siguieran los trámites adecuados o se tuviera la documentación necesaria”, dijo en una conferencia de prensa el portavoz de la agencia de la ONU, Christopher de Bono.

Aseguró que el gobierno haitiano ha sido informado de la situación y se encuentra investigándola.

Además, ha incrementado la presencia de agentes y la vigilancia en los puntos de salida del país.

“A los traficantes les gusta pescar en aguas vulnerables y sabemos por experiencia que hay casos de tráfico en medio del caos que suele suceder a las emergencias”, agregó.

El portavoz declinó ofrecer cifras sobre niños trasladados ilegalmente fuera del país, por considerar que serían “especulativas”, aunque fuentes de UNICEF en Ginebra denunciaron ayer el rapto de al menos 15 menores en hospitales haitianos tras el sismo.

Las declaraciones del portavoz reflejan la creciente preocupación de los responsables de la ONU ante la posibilidad de que el interés en algunos países por acelerar los trámites de adopción de niños haitianos tenga consecuencias indeseadas o facilite la labor de los traficantes de menores.

Fuentes del organismo señalaron que hay al menos 500 mil menores entre los 2 millones de damnificados por el terremoto de siete grados en la escala de Richter que devastó el área de Puerto Príncipe y otras ciudades haitianas y causó más de 80 mil muertes.

La trata de personas ya existía

Antes, Jean Claude Legrand, asesor de UNICEF, dijo que “hemos constatado el secuestro de 15 niños en diferentes hospitales de Haití y sospechamos que han sido plagiados por redes de trata a través de Santo Domingo”.

“Las redes existían previamente (al terremoto) en Haití, y eran bastante activas, secuestrando niños y entregándolos al mercado internacional de adopciones. Lo que ocurre siempre es que cuando hay una catástrofe, las redes se aprovechan de la fragilidad del Estado y de los sistemas de control”, dijo Legrand. Pero el jefe de prensa de UNICEF en Ginebra, Jeremy Hartley, aclaró que la cifra tenía una “evidencia anecdótica y estamos tratando de buscar datos más exactos, pero dada la situación en Haití eso es muy difícil”.

Naciones Unidas y Estados Unidos firmaron ayer un acuerdo que formaliza el papel que desempeñan los cerca de 12 mil militares estadounidenses desplegados en Haití para ayudar a las víctimas del terremoto del 12 de enero.

El documento fue rubricado en Puerto Príncipe por el jefe interino de la misión de estabilización de la ONU en Haití (Minustah), el guatemalteco Edmond Mulet, y el embajador estadounidense en el país caribeño, Kenneth Merten. En el documento se precisa que la misión de la ONU es la responsable de ayudar a las autoridades haitianas a mantener el orden, la estabilidad y el estado de derecho. “En consulta con el gobierno haitiano, la ONU se encarga de coordinar la respuesta internacional al terremoto en Haití y el enviado especial de la ONU (Mulet) ocupa el cargo de mayor rango con autoridad sobre todas las actividades de la ONU”, precisa el texto. Aclara que los militares de EU en Haití obedecerán a la cadena de mando de su país, aunque asumen el compromiso de apoyar las prioridades en materia humanitaria y logística marcadas por la ONU.

Son 111 mil 449 los muertos

El gobierno de Haití elevó ayer a 111 mil 499 la cifra oficial de muertos a causa del sismo, pero advirtió que ésta continuará creciendo conforme avance la remoción de escombros.

Ayer fueron rescatadas con vida dos personas. Vecinos sacaron de entre los escombros a Marie Carida Romain, de 84 años, cuya condición es considerada por los médicos como muy delicada.

Horas después, un equipo israelí rescató a un joven de 22 años, todavía sin identificar. Su condición es estable.