Aviación en fase terminal: ASPA

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La falta de comunicación y coordinación que existe entre autoridades reguladoras y las normativas de la aviación civil para tratar de restablecer una política aeronáutica que está quebrada desde hace varios años, ha incrementado la crisis del sector aéreo y lo tiene al borde de la fase terminal, aseguró el capitán Fernando Perfecto, secretario general de la Asociación Sindical de Pilotes Aviadores (ASPA).

La situación es aún más alarmante si se toma en cuenta que desde hace 10 años, cada 13 meses en promedio desaparece una aerolínea, el caso más reciente es el de Aviacsa, dijo Perfecto.

Durante el desarrollo del seminario Situación de la Aviación Civil en México, el también secretario general de la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores subrayó que mientras continúe esa falta de voluntad de ambas partes, crecerá más “el círculo hiper vicioso” que ofrece tarifas muy bajas al consumidor a cambio de buenos márgenes de seguridad.

Juan Rodríguez Castañeda, presidente de la Cámara Nacional de Aerotransportes (Canaero), consideró que el modelo de política aeronáutica en México debe enfocarse principalmente en seis puntos: trato equitativo, certidumbre jurídica, mejora en los niveles de eficiencia y seguridad; mejorar la calidad del servicio, fomentar la inversión en tecnología y fomentar la libre competencia “esto en términos generales, la definición precisa le corresponde al gobierno federal”.

Recordó que en 2001, el gobierno federal ya había intentado establecer una política aeronáutica que pretendía establecer una política integral de largo plazo basada en: certidumbre jurídica, competencia justa y equitativa, seguridad operacional, mayor cobertura de los servicios aéreos, capacitación al personal y mayor reciprocidad con los mercados externos, pero no se alcanzaron los objetivos, aseguró.

En 2003 las autoridades volvieron a fracasar, ahora en su intento de crear un aeropuerto alterno al de la ciudad de México (AICM), y para subsanar la falla se creó el Sistema Metropolitano de Aeropuertos, con el cual se pretendió que las terminales de Toluca, Querétaro, Puebla y Cuernavaca se complementaran con la del DF.

De acuerdo con los expertos en aeronáutica, esa política nunca alcanzó su objetivo porque no se reflejaron cambios en el reglamento, ni se fortaleció a la autoridad encargada de regular al sector.

En 2005, con la venta de Mexicana, comenzaban a darse las condiciones de competencia pero la SCT inició el otorgamiento de concesiones a nuevos jugadores y saturó el mercado, hubo hasta 14 operadores de pasajeros en el mercado doméstico: Click, Avolar, Alma, Volaris, Interjet, se creó Viva Aerobús, más tarde se sumaron Aviacsa, Aerocalifornia, Aeromar, Magnichartes y Azteca.

La liberación de la competencia, según el titular de la Canaero, no se dio de forma ordenada, porque las aerolíneas no se enfocaron en destinos que tenían baja afluencia de turismo, sino por el contrario, se enfocaron en las rutas de mayor densidad de tráfico y esto provocó una clara sobreoferta, con bajos factores de ocupación y una paulatina desaparición de otros competidores.

“En 2007 Azteca inició el desfile, en 2008 Alma, Avolar y Nova Air siguieron sus pasos, y a finales del año pasado le tocó a Aviacsa, que si bien todavía no cierra, difícilmente regresará al mercado. Entonces esta apertura desorganizada al final las consecuencias son menos operadores”, dijo Juan Rodríguez Castañeda, presidente de la Cámara Nacional de Aerotransportes.