Beltrones: las reformas fiscales serán prioridad.

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Manlio Fabio Beltrones, coordinador del PRI en el Senado, afirmó que el reto inmediato de 2010 será acompasar la reforma fiscal y la recuperación económica y del empleo, lo que permitirá “medir” al nuevo gabinete económico y social.

Dijo que todas estas metas deberán cumplirse, sin caer en la tentación de que la recuperación electoral del partido en el gobierno, el PAN, sea la prioridad.

“Este parece ser el consenso de los sectores productivos y las fuerzas políticas y sociales, y con este parámetro habrá de medirse el talento del nuevo gabinete”.

En un comunicado difundido ayer, el también ex gobernador de Sonora, adelantó el voto a favor de su bancada por la ratificación de Agustín Carstens como gobernador del Banco de México.

“El grupo parlamentario del PRI no dudará en votar por la ratificación del doctor Agustín Carstens como gobernador del Banco de México, porque su capacidad profesional y reconocimiento interno e internacional son una garantía de que la autonomía de la banca central será mantenida, con el mismo rigor técnico y la firmeza ejemplar que caracterizó la gestión del doctor Guillermo Ortiz Martínez”.

Beltrones Rivera dijo que la asignatura para el próximo año en materia económica es compleja.

Desde su punto de vista, el reto implica consolidar las bases fiscales del Estado en un contexto de crisis económica e ingresos petroleros decrecientes y mantener la disciplina fiscal y presupuestal, sin caer en la tentación de que la recuperación electoral del partido en el gobierno sea la prioridad.

Llama a buscar salidas viables

Beltrones afirmó que el paquete económico de 2010 no dejó satisfecho a nadie y apenas resolvió la emergencia, de ahí que se perfila la responsabilidad del gobierno federal de proponer una reforma fiscal viable para todos los sectores.

“Siendo que el paquete económico de 2010 no satisfizo a nadie y apenas resolvió la emergencia, la responsabilidad del gobierno federal será ineludible: proponer e implementar una reforma fiscal que asegure la viabilidad de las finanzas públicas y el cumplimiento de las responsabilidades económicas y sociales del Estado, sin hacer depender la recuperación económica del país del vigor o la incertidumbre del crecimiento estadounidense”.

Advirtió que estarán pendientes de que los criterios políticos no prevalezcan sobre las decisiones económicas y sociales, “pues se pondrían en riesgo los indicadores de una recuperación económica que no se consolida, y una recesión que deja un pesado lastre de empobrecimiento y desempleo”.