Colombia extradita al “rey de las pirámides”.

Noticia:


David Murcia Guzmán, de 30 años, autor de la mayor estafa en la historia de Colombia, fue extraditado ayer a Estados Unidos, acusado de haber lavado más de 30 millones de dólares del narcotráfico.

Rodeado de policías, Murcia Guzmán, quien pasó de ser “El Rey Midas” al “Madoff colombiano” o “rey de las pirámides”, abordó un avión privado de la DEA en horas de la mañana, protegido por un chaleco antibalas, con destino a Nueva York, donde será sometido a un proceso iniciado por lavado de activos en una corte de esa ciudad.

“Se va tranquilo. Mi cliente está muy tranquilo. Está preparado tanto sicológica como judicialmente para ir a juicio a Estados Unidos y vamos a ir hasta las últimas instancias”, explicó Aydé Trujillo, abogada defensora de Murcia.

Dueño del emporio DMG (por las siglas de su nombre), Murcia es investigado por blanqueo de divisas en tribunales de Panamá y de EU.

Murcia fue detenido en Panamá el 17 de noviembre de 2008, cuando las pirámides financieras —junto con sus excentricidades—, que lo habían vuelto una figura conocida, comenzaron a desmoronarse como un castillo de naipes. Por entonces, decenas de miles de ahorristas colombianos protagonizaban escenas de desesperación al haberlo perdido todo, en un pase de manos, sin que ni las empresas de Murcia ni el Estado respondieran por sus ahorros.

La Justicia colombiana le había impuesto una multa de 12.5 millones de dólares, además de una sentencia de 25 años de prisión.

Murcia admitió, entre otras cosas, el haber colaborado con más de cuatro millones de euros a la campaña electoral del actual presidente panameño Ricardo Martinelli.

La meteórica carrera de Murcia, quien pasó de ser un vendedor ambulante a un magnate de las finanzas, se acabó cuando la justicia le echó el guante. Según el juez colombiano José Reyes, Murcia había captado 2 mil 500 millones de dólares gracias a los casi 195 mil afiliados de esas pirámides.

Murcia ha insistido en que su negocio era lícito porque de cada peso invertido se había proyectado ganar 10 y acusó a la administración del presidente Álvaro Uribe de “emprender una persecución en mi contra”, fruto de que en algún momento intentara involucrar a los hijos del jefe de Estado en algunos de sus negocios.

Murcia fue deportado de Panamá a Colombia dos días después de la intervención de las autoridades a su conglomerado de empresas en Colombia que captaba dinero a través de tarjetas “repago” y a cambio del pago de intereses que superaban 50% de lo consignado. DMG tenía “sucursales” en Panamá, Venezuela y Ecuador, pero fueron intervenidas por los respectivos gobiernos. El acusado tenía planeado ampliar el negocio a México, Perú y Brasil.

FARC admiten asesinato de Cuéllar

La guerrilla de las FARC aceptó ayer su responsabilidad por la muerte del gobernador colombiano del Caquetá, Luis Francisco Cuéllar, a quien secuestraron el pasado 22 de diciembre, y argumentó haberle entablado un “juicio político” por presunta corrupción.

“El objetivo de la retención no era ajusticiarlo, ni hacerle exigencias económicas, sino realizarle un juicio político por corrupto”, argumentaron las FARC en un comunicado, en el que dijeron que la muerte del gobernador “es consecuencia directa de la orden impartida por (el presidente) Álvaro Uribe a las fuerzas militares del rescate a sangre y fuego”.

Ayer mismo, un portavoz oficial de las Fuerzas Armadas colombianas informó ayer que siete presuntos integrantes de las FARC fallecieron en combates registrados en dos regiones de Colombia, con lo que suman ya 36 los insurgentes muertos en la última semana. Entre los guerrilleros abatidos ayer estaba el jefe insurgente Eliseo Mancilla, alias El Negro Arturo, quien vigiló en cautiverio a la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt y considerado presunto autor intelectual del homicidio de tres ediles de la región del Sumapaz, en octubre pasado.