PGJ detiene a presunta homicida de luchadores.

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Sin que las autoridades hayan logrado su confesión, Estela González Calva, de 65 años de edad, alias La Tía, fue consignada al penal femenil de Santa Martha Acatitla, donde enfrentará proceso por el homicidio de La Parkita y El Espectrito II.

El fiscal de Homicidios de la Procuraduría del DF, Joel Díaz Escobar, reconoció que no cuentan con los elementos suficientes para determinar que la mujer está involucrada directamente en el doble homicidio. Sin embargo, afirmó que fue consignada por los delitos de robo agravado y homicidio calificado.

La detenida reconoció que convivió, junto con otra mujer, identificada como La Gorda, con los miniluchadores durante hora y media en la plaza Garibaldi, y después pasaron a la habitación 52 del hotel Moderno, donde permanecieron entre 15 y 20 minutos, luego de no ponerse de acuerdo con sus clientes.

Díaz Escobar informó que La Tía acepta que adquirió unas gotas oftálmicas para uso personal, pero niega que las aplicó en las bebidas de los luchadores.

“Únicamente les digo una cosa: yo no soy culpable, y hablo con la certeza de que tengo la conciencia tranquila. No soy culpable, por eso me siento tan serena”, expresó Estela González al ser presentada ante los medios de comunicación. Mostraba el retrato hablado que realizó la PGJDF con los diferentes testimonios, y que EL UNIVERSAL publicó el pasado 3 de julio.

El fiscal afirmó que según los resultados de la necropsia de ley, los luchadores murieron por un paro cardiorrespiratorio, causado por una sustancia denominada ciclopentolato de las gotas para los ojos, combinada con el alcohol de las bebidas.

La sexoservidora, presunta responsable de los homicidios de los hermanos Alberto y Alejandro Jiménez Pérez, fue detenida cuando regresó a su lugar de residencia, en la calle Atlacomulco, colonia San Felipe de Jesús, en Gustavo A. Madero, tras refugiarse en domicilios del estado de México, principalmente en Ecatepec.

“Logramos ubicarla cerca de su domicilio, cuando iba por ropa, pues iba en la noche o madrugada, para llevársela y esconderse en otros lados. Ayer tuvimos suerte y fue detenida”, afirmó el comandante de la Policía Judicial de Homicidios, Sergio Atenco.

Cae por llamadas

La aprehensión se logró mediante un análisis y cruce de llamadas del teléfono que presuntamente robo a uno de los luchadores, según explicó el fiscal de Homicidios.

De las investigaciones y del video se estableció que una de las mujeres regresó a la recepción, donde recibió una cerveza.

Posteriormente se observa cuando las dos probables responsables del doble homicidio salen de la habitación y se acercan a la recepcionista, a quien le dijeron: “Ya nos vamos. Los caballeros se quedan a descansar”.

La Procuraduría del Distrito Federal señaló que a las 13:00 horas, el camarero tocó a la habitación 52 para informar a los ocupantes que se había terminado el tiempo del alquiler, y al no encontrar respuesta, utilizó la llave de repuesto y se encontró a los hombres sin vida, el pasado 29 de junio.

De sus declaraciones también se podrá definir la culpabilidad o inocencia de las tres personas que se encuentran en el Centro de Arraigos: Claudia Rosas Toledo y María Luisa Aparicio Ortega, encargadas del hotel Moderno, y Francisco Vázquez Martínez, vendedor de bebidas en Garibaldi.