Iraníes continúan ola de disturbios.

Noticia:


Manifestantes iraníes causaron ayer incendios y destrozaron escaparates, en un segundo día de violencia, mientras el principal candidato presidencial de la oposición, Hussein Moussavi, exhortó a las autoridades a anular los resultados de una elección que consideró fraudulenta y que permitió la reelección del presidente Mahmud Ahmadineyad.

La policía antimotines volvió a reprimir con brutalidad a los manifestantes y el régimen de Teherán bloqueó sitios en la internet usados por partidarios de Moussavi, quien a su vez se atribuyó el triunfo en los comicios presidenciales del viernes.

Ahmadineyad desestimó las protestas, las peores en una década en Teherán, diciendo que “carecían de importancia”.

La policía iraní confirmó ayer que unos 60 manifestantes fueron arrestados durante los enfrentamientos en la noche del sábado entre la policía y los seguidores de Moussavi.

En tanto, el vicepresidente de EU, Joseph Biden, dijo ayer que tenía sus dudas sobre la imparcialidad de los comicios y que EU y otros países necesitan más tiempo para analizar los resultados antes de hacer una evaluación mejor. Ahmadinejad, sin embargo, aseguró que las elecciones fueron limpias.

En la calle Vali Asr de Teherán, decenas de miles de personas desfilaron en respaldo a Ahmadineyad, agitando banderas iraníes y vitoreando al presidente.

En cuanto a Moussavi, tras señalar que la única forma de restablecer la confianza del público era cancelar las elecciones y convocar a nuevos comicios, pidió a sus simpatizantes que continúen con una oposición “civilizada y legal” a los resultados.

También pidió a la policía que cese de atacar a sus partidarios. Mussavi pretende dar un discurso hoy en una plaza central de la ciudad. Se desconoce si podrá celebrar este evento, ya que necesita la aprobación de las autoridades.

Ante la violencia en Teherán, las autoridades respondieron con amplias medidas de seguridad. Eso incluyó no sólo el emplazamiento de escuadrones antimotines en torno a la capital, sino también cortar mensajes en los teléfonos celulares y bloquear sitios en la internet usados por la campaña de Moussavi.

En París, el ministro de Relaciones Exteriores de Francia, Bernard Kouchner, dijo que su gobierno está “muy preocupado” por la situación en Irán y criticó a las autoridades de Teherán por “la reacción brutal” que han tenido en ocasiones hacia las protestas opositoras.

En el segundo día de enfrentamientos, decenas de adolescentes que gritaban “¡Muerte al dictador!, rompieron las ventanillas “de autobuses en varias calles del centro de Teherán. También incendiaron bancos y apilaron neumáticos que prendieron fuego para bloquear el avance policial.

Policías antimotines golpearon a algunos de los manifestantes con garrotes. Negocios, oficinas del gobierno y empresas cerraron antes de concluir la jornada laboral, conforme la tensión iba en aumento.


Comentario:

Será difícil demostrar que no hubo fraude en las elecciones. La desconfianza ya se sembró.