Suecia monitorea sus plantas nucleares.

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Suecia puso una de sus tres plantas nucleares bajo supervisión especial tras años de ignorar normas de seguridad, dijo la agencia nacional de control nuclear el miércoles.

Dos incidentes ''extremadamente serios'' han ocurrido en los últimos dos años, explicó el vocero de la Autoridad Nuclear Sueca, Mattias Skold. El primero, ocurrido el año pasado, estuvo relacionado con fallas en los mecanismos encargados de regular la actividad del reactor.

El segundo incidente ocurrió en marzo durante una auditoría, que determinó que un sistema automático había fallado.

Ambas funciones son claves si surge la necesidad de suspender rápidamente las actividades del reactor.

''Se pudo haber perdido tiempo valioso'' dijo Skold, quien agregó que ninguno de los reactores estaba en funcionamiento cuando se identificaron las irregularidades.

En el pasado, la gerencia de la planta nuclear de Ringhals ha sido incapaz de solucionar las deficiencias indicadas por la autoridad nuclear, dijo el funcionario de la agencia Leif Karlsson.

La supervisión especial incluye investigaciones y reportes frecuentes de las operaciones en Ringhals. Este tipo de control sólo se ha realizado pocas veces en la historia de Suecia.

Suecia tiene en total 10 reactores en Oskarshamn, Ringhals y Forsmark, los cuales generan la mitad de la electricidad consumida en el país. Cuatro de estos reactores se encuentran en Ringhals, operados por las compañías de electricidad Vattenfall y E.ON.

Otra planta de Vattenfall en Alemania debió suspender operaciones la semana pasada, abriendo un debate entre los alemanes sobre su papel como productor de energía nuclear.