Sarkozy y su partido salen indemnes de las elecciones en Francia.

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El partido de centro derecha de Nicolas Sarkozy, la Unión por un Movimiento Popular (UMP), ganó con la claridad esperada en Francia, cuyos habitantes reflejaron con una abstención récord (el 59,4%) el desinterés con el que se ha desarrollado la campaña y la votación. La UMP ha obtenido alrededor del 27,4% de los votos y 72 escaños, con el 74% escrutado.

Más que cualquier candidato al Europarlamento, es Sarkozy el gran vencedor de unos comicios que en Francia se han vivido como una cuestión puramente nacional y que habían llegado en un momento delicado para el presidente de la República tras dos años de mandato. Desde enero, ha sufrido una creciente protesta callejera por sus medidas anticrisis a la vez que veía cómo su popularidad descendía desde enero de manera ininterrumpida.

Xavier Bertrand, secretario general de la UMP, con una gran sonrisa, resumió así el final de la noche: "Amigos, nuestro partido ha obtenido un éxito que va más allá de lo que se preveía. Es la primera vez desde 1970 que el partido presidencial gana unas elecciones europeas", añadió. Los seguidores que le escuchaban le acallaron con una palabra: "¡Nicolas!, ¡Nicolas!".

Por el otro lado asoman los grandes perdedores de la jornada: el Partido Socialista francés (PS) y su nueva primera secretaria, Martine Aubry, elegida hace seis meses tras el convulso y desgarrador congreso de Reims. El PS ha obtenido el 16,9% de los votos. El PS superaba el 20% de los votos en los sondeos. Alcanzar esa cifra significaba una victoria de Aubry y un reforzamiento de su siempre cuestionado liderazgo. Quedar por debajo abocaba a esta dirigente a un fracaso personal. Estar por debajo del 17% representa un gran hundimiento (en las anteriores elecciones europeas de 2004 obtuvo un 28,9%) que sepulta al PS.

A las nueve de la noche, Aubry, sin ni siquiera esperar a la proclamación de los resultados definitivos, compareció ante la prensa y asumió los malos resultados: "Todavía no somos creíbles. Es cierto que hemos tenido luchas y divisiones. No hay que buscar excusas fuera. Asumo mi responsabilidad". Por un momento alguien pensó que pensaba dimitir. Pero Aubry lo aclaró poco después: "Voy a continuar".

El segundo de los vencedores de estas elecciones es Daniel El Rojo, el líder de la Revolución estudiantil de Mayo 68, el antiguo anarquista devenido ecologista y cuyo partido, Ecología Europa, en el que también milita el activista José Bové, obtuvo el 14,9% de los votos, según los sondeos.

Y otro de los perdedores evidentes es François Bayrou, la cabeza visible del partido del partido de centro Modem, que quedó muy lejos de sus expectativas. El 8,2% de los votos se consideran una derrota personal debido a que Bayrou, a pesar de no ser candidato, se había implicado como nunca en la campaña, convirtiéndose, para bien y para mal, en uno de sus protagonistas.

El Frente Nacional de Jean Marie Le Pen, que en las últimas elecciones europeas de 2004 obtuvo un 9,81% de los votos no llegó esta vez al 5%.

El Nuevo Partido Anticapitalista de Olivier Besancenot, obtuvo un porcentaje parecido: el 5%. El resultado satisfizo a Besancenot, que se confesó "contento" con el porcentaje obtenido. "No olvidemos que somos una formación que se presentaba por primera vez".


Comentario:

Sarkozy mantiene su buena imagen.