Noticia:
Líderes de cúpulas empresariales del país cerraron filas con la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac) en contra del cierre de restaurantes en el Distrito Federal.
“No podemos enfrentar una crisis (sanitaria) con una crisis que pueda causar mayores destrozos”, aseveró Mario Sánchez Ruiz, presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco-Servitur).
A partir del cierre de restaurantes, la Central de Abastos del Distrito Federal dejó de vender ayer 40% de la mercancía que regularmente coloca en el mercado, informó Sánchez Ruiz.
Y agregó que este martes hasta 600 mil empleados de la industria restaurantera dejaron de laborar en la capital del país.
“Que dejemos a tanta gente sin trabajo y sin ingresos no es una forma de enfrentarla (la emergencia sanitaria)”, reiteró el titular de Concanaco-Servitur.
Miguel Marón, titular de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), y Ricardo González Sada, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), respaldaron la postura en contra del cierre de restaurantes en el Distrito Federal, aunque no precisaron de qué manera apoyarán al gremio.
Las declaraciones se dieron después de una reunión celebrada en la Secretaría de Economía a la que acudieron el titular de la dependencia, Gerardo Ruiz Mateos; el secretario del Trabajo, Javier Lozano; titulares de cámaras empresariales y representantes sindicales.
No obstante, Lozano dijo anoche que el gobierno federal respeta las decisiones de la administración de Marcelo Ebrard.
Así, más de 35 mil restaurantes, pero también fondas, cocinas económicas y locales de comida preparada en 312 mercados públicos quedaron incorporados ayer a la restricción que impuso el gobierno capitalino, a través de la cual se les impidió vender alimentos al interior de esos negocios. Sólo se les permitía ofrecer comida para llevar. De no acatar esta disposición, los dueños de todos los establecimientos y locales de venta de comida preparada enfrentarían una multa y clausura.
La restricción entró en vigor ayer a partir de las 11:00 horas y estará vigente hasta el 5 de mayo, anunció el gobierno de Marcelo Ebrard. Incluye a billares, gimnasios, clubes deportivos, bares, cantinas, centros de convenciones, discotecas, salones de baile, cabarets y centros nocturnos.
Esta medida causó de inmediato la molestia de la Canirac, que denunció que unos 70 mil vendedores de alimentos en la vía pública no cumplen con la disposición. Además, EL UNIVERSAL comprobó que algunos restaurantes en el Centro Histórico, particularmente en la calle Madero, incumplieron con la disposición y mantenían su servicio normal a las 16:00 horas, con un cupo al límite.
Primero en una serie de declaraciones y después en conferencia, los líderes de la Canirac como Daniel Loeza, vicepresidente del gremio, acusaron que el acuerdo emitido por el jefe de Gobierno provocará pérdidas diarias por 150 millones de pesos al sector, equivalentes a mil 50 millones de pesos hasta el 5 de mayo, además de que 600 mil empleados de restaurantes y hasta de hoteles resultarán afectados.
Explicó que 96% de los restaurantes son pequeñas o medianas empresas, y debido a ello es difícil que cuenten con la liquidez necesaria para comprar empaques desechables. Además, los establecimientos enfrentarán graves pérdidas debido a que en el interior se quedaron productos perecederos. Francisco Mijares, presidente de la Canirac, dijo que no recurrirán al amparo, pues aceptó que mientras se obtiene la suspensión provisional sería muy tarde para ellos y ya no tendría caso contar con ese recurso judicial. Sin embargo, dijo que hoy acudirá a la sede del GDF para pedirle al jefe de Gobierno que levante la restricción.
Comentario:
Tienen en parte razón, por las graves pérdidas económicas; pero es una buena medida hasta que se controle la epidemia.
Coronavirus, la amenaza esta ahí afuera
Hace 4 años
No hay comentarios:
Publicar un comentario