Logra Sarkozy victoria pírrica ante Rusia.

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¿Éxito diplomático o victoria pírrica de Nicolas Sarkozy en Moscú? El resultado de la misión del mandatario francés para acabar con la crisis en el Cáucaso, en su calidad de presidente de turno de la Unión Europea, tiene varias lecturas, pero la más importante es la concesión de Moscú, que prometió retirar todas sus tropas de Georgia en el plazo de un mes.

Pero el presidente ruso, Dmitri Medvedev, junto con aprobar el despliegue de unos 200 observadores de la UE en Georgia y el inicio de unas discusiones internacionales sobre el futuro de Osetia de Sur y Abjasia, recordó a Sarkozy que su país no está dispuesto a ceder en un aspecto que causa inquietud en Occidente: la independencia de las dos regiones separatistas.

Durante una rueda de prensa conjunta, Medvedev recordó que el reconocimiento por Moscú de las independencias de las dos regiones tenía un “carácter irrevocable” y lamentó que la UE no estuviera en condiciones de comprender que la independencia era la única manera de garantizar la seguridad de los pueblos de Osetia del Sur y Abjasia.

“Vamos a prestarles respaldo económico, humanitario y militar”, insistió el presidente ruso, al marcar las diferencias con la UE, que sigue defendiendo la integridad territorial de Georgia.

“Pienso que en el futuro, la decisión que adoptó Rusia será comprensible para un mayor número de países y nuestro ejemplo será seguido por otros Estados”.

Sarkozy, quien viajó a Moscú acompañado de su ministro de Asuntos Exteriores, Bernard Kouchner; del presidente de la Comisión europea, José Manuel Durao Barroso, y del responsable de Política Exterior de la Unión Europea, Javier Solana, aceptó en silencio las condiciones de Moscú para acceder a retirar sus tropas de Georgia.

El presidente francés, en cambio, prefirió destacar durante la rueda de prensa el compromiso alcanzado en Moscú y que hará posible que las tropas rusas abandonen el territorio de Georgia, aunque la retirada de las tropas quedará sujeta a la firma de un documento vinculante que garantice que no se utilizará la fuerza contra Osetia del Sur y Abjasia.

Nicolas Sarkozy, en un interesado gesto dirigido a su anfitrión recordó, que si entran en vigor los acuerdos alcanzados ayer en Moscú, no veía ningún motivo para que las reuniones entre Rusia y la UE, que fueron congeladas como represalia a la aventura militar rusa en Georgia, no se reanuden en octubre.

“Todo está muy claro. Queremos cooperación, paz y difícilmente alguien necesita de confrontación entre Europa y Rusia”, dijo Sarkozy. “Somos portadores de la esperanza de 27 países que desean fe, confianza y buenas relaciones”, añadió el mandatario francés, al revelar la principal meta de su misión de mediador: normalizar las relaciones entre la UE y Moscú, a pesar de la modificación de fronteras que impuso Rusia a Georgia.


Comentario:

No hay peor lucha que la que no se hace y es evidente que el papel que está jugando Francia a nivel mundial, bajo el mando de Nicolás Sarkozy es fundamental como mediador. Asumir un liderazgo que sirva de contrapeso al papel de Estados Unidos, permite lograr un equilibrio en la correlación de fuerzas. Son movimientos de mucha astucia por parte de Sarkosy, porque manda el mensaje de que estoy mediando bajo nuevas premisas políticas, diferentes a las de Washington y frente a esto, "acorrala" al otro país a tener que ceder.