Cadena perpetua por matar a su hermana menor por cuestión de honor.

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Un joven alemán de origen afgano de 24 años de edad fue condenado hoy a cadena perpetua por un tribunal de Hamburgo acusado de asesinar a su hermana de 16 años por cuestión de honor familiar, al adoptar la adolescente un modo de vida occidental que chocaba con las costumbres de su país de origen.

El condenado, Ahmad-Sobair Obeidi, fue encontrado culpable de asesinato al asestar a su hermana Morsal, en un aparcamiento del barrio de San Jorge de Hamburgo el 15 de mayo de 2008, un total de 23 puñaladas que le causaron la muerte.

El tribunal asumió la petición de pena de la fiscalía, que acusó al joven de actuar con un "móvil abyecto" y con alevosía, mientras la defensa había solicitado que el crimen fuese calificado como homicidio y no asesinato, cometido en un estado de enajenación.

Al anunciar el juez la sentencia, la familia del acusado presente en la sala lanzó gritos de protesta y golpearon el cristal blindado de seguridad que protege la sala de vistas.

El presidente del tribunal, el juez Wolfgang Backen, señaló durante la lectura del veredicto que el acusado "amaba por un lado a su hermana, pero por otro la odiaba debido a su estilo de vida".

El juez subrayó que mientras el resto de sus hermanos "se atenían a las estrictas reglas de comportamiento afganas, la joven tenía sus propias ideas".

Durante su intervención final, la fiscalía había subrayado que para el acusado "su hermana no actuaba como debía. En su mundo machista solo cabía una respuesta: debía desaparecer".

Añadió que Ahmad-Sobair Obeidi puso el honor familiar por encima de la vida de su hermana y planeó su asesinato con mucho tiempo de antelación.

El asesinato de la adolescente de origen afgano Morsal causó indignación en Alemania, donde se discute sobre la negativa de muchos inmigrantes a adaptarse a la sociedad local y la exigencia de progenitores a sus vástagos de respetar costumbres ajenas a su vida cotidiana.

El condenado fue detenido un día después del crimen por la policía, ante la que hizo una amplia confesión, aunque después ante el tribunal negó la intención de matar a su hermana.

Comentario:

Actos verdaderamente de locura.