Sarkozy, última carta de francesa presa por plagio.

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Florence Cassez recibe todos los días medio centenar de libros y cartas. Los acomoda en su celda y trata de leer. Pero no está de humor. Hoy se debate en una encrucijada involuntaria: volver a su país para vivir 60 años en la cárcel o seguir luchando contra el Estado mexicano para probar, asegura, su inocencia.

Esta francesa tiene 34 años de edad —cuatro de ellos los ha pasado en penales de Santa Martha y de Tepepan— y su caso está en la lista de asuntos que el presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, tratará con su homólogo Felipe Calderón, durante su visita a México. Más de 140 parlamentarios y ex ministro de justicia de su país le exigieron a Sarkozy demandara su liberación.

Cassez fue detenida en diciembre de 2005 y sentenciada a 96 años de cárcel por su participación en tres secuestros cometidos por la banda de Los Zodiaco. Hoy su fotografía cuelga de las alcaldías de Boulogne sur Mer y Pas-de-Calais, en Francia, en demanda de su libertad.

En la víspera de la llegada de Sarkozy a México se espera el arribo del abogado Franck Berton, avalado por el presidente de Francia, y que se caracteriza por ser uno de los principales defensores de los derechos humanos de franceses. “La llegada del presidente significa esperanza para Florence”, dice su abogado mexicano Agustín Acosta.

Cassez, que comienza a ser noticia y casi una figura en Francia, alega inocencia, pero la historia tiene otra versión: la de Cristina Ríos Valladares, una de las tres personas secuestradas por Los Zodiaco, que vive en la frontera de EU con México. “Hoy padecemos un exilio forzado por el miedo y la inseguridad. Mi familia está rota.

“Es indescriptible lo que mi hijo y yo vivimos del 19 de octubre de 2005 al 9 de diciembre del mismo año. Fueron 52 días de cautiverio en el que fui víctima de abuso sexual y, los tres, de tortura sicológica…. Acusados de nuestro secuestro fueron detenidos Israel Vallarta y Florence Cassez, esta última de origen francés, quien

ahora se presenta como víctima de mi caso y no como cómplice del mismo”.
Aún y con esas versiones Florence Cassez cuenta con el apoyo de tres diputados de la Asamblea Nacional (Thierry Lazaro, Frederic Cuvillier y Jean Luc Romero), que han exigido información al gobierno de Sarkozy sobre lo que ocurre en México.

Agustín Acosta advierte que la percepción de los franceses en torno a Florence ha cambiado: “En Francia, un juicio que empieza con un montaje, y ese montaje es revelado y exhibido ante la opinión pública, ese procedimiento quedaría desestimado y hace tiempo Florence habría obtenido su libertad. Los franceses ven este tema como el de una compatriota que fue sentenciada y linchada injustificadamente”.


Comentario:

Es un asunto legal, no tanto político. Ni Sarkozy ni Calderón son jueces para decidir la suerte de esta mujer. Le corresponde a la Corte y en el último de los casos, el asunto podría ser revisado por la justicia francesa. Si es inocente, que se compruebe.