Gobernación pide no lucrar con inseguridad.

Noticia:

El secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, dijo en un mensaje que el gobierno encabeza una estrategia integral para combatir la inseguridad y pidió no caer en provocaciones de quienes quieren lucrar políticamente con el tema.

Aunque no quiso personalizar el mensaje, el secretario salió a los medios luego de las declaraciones del senador Manlio Fabio Beltrones, publicadas en la edición de ayer de EL UNIVERSAL, en las que asegura que el presidente Felipe Calderón fracasó en su estrategia contra la inseguridad y que ha actuado “irresponsablemente” ante ese problema.

Mouriño señaló que en materia de seguridad no debe existir ideología o militancia partidista, y que es necesario trabajar de manera coordinada; de otra forma, la gente “indignada y molesta” tomará justicia por su propia mano, reconoció.

Afirmó que el gobierno encabeza una estrategia integral ante el “justo reclamo ciudadano” de mayor seguridad, y que por ello el Ejecutivo convocó al Consejo Nacional de Seguridad Pública, al que acudirá Calderón con “ánimo consultivo, de colaboración y de acuerdo”.

En tanto, 22 hombres fueron asesinados en las últimas 24 horas en Chihuahua; 19 de los crímenes ocurrieron en Ciudad Juárez, donde suman 870 en lo que va del año.

Comentario:

La convocatoria para asistir a una reunión para abordar el tema de seguridad ya está dado. Por lo pronto, lo que "brilla y resplandece" es la inmadurez de un Manlio Fabio Beltrones, quien aprovecha la coyuntura para tratar de "llevar agua a su molino", pero ¿lo lograráde esa manera?
Desgraciadamente, hay muchas personas que todavía se tragan el anzuelo de que los problemas actuales de México son por culpa del gobierno panista, cuando dichos asuntos están pendientes desde la "GRAN ERA" priísta y nunca hicieron absolutamente nada por resolverlos. Un partido moderno, de oposición, debe ser maduro y eso significa: propositivo, algo de lo que carece el PRI. Del resto, mejor ni hablar, mientra hay uno que no logra ponerse de acuerdo para nombrar a su propio presidente de partido.