Condenas de hasta 15 años de cárcel para miembros de Nuevas Brigadas Rojas.

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Un Tribunal de Milán condenó hoy a penas de hasta 15 años de cárcel a 14 miembros de las llamadas "Nuevas Brigadas Rojas" italianas, que pretendían atentar contra la casa del primer ministro, Silvio Berlusconi, así como contra varios medios de comunicación y empresas relevantes del país.

Estos catorce condenados, miembros del también conocido como "Partido Comunista Político-Militar", fueron detenidos en una operación policial desarrollada en febrero de 2007 en las ciudades norteñas de Milán, Padua, Turín y Trieste.

Las penas máximas de cárcel, de 15 años, recayeron sobre Davide Bortolato y Claudio Latino, líderes de las células de las "Nuevas Brigadas Rojas" en Padua y Milán, respectivamente, mientras que Vicenzo Sisi, jefe del grupo en Turín, tendrá que afrontar 13 años y 10 meses de prisión.

Entre los condenados, en este caso a 11 años y cuatro meses de prisión, figura también Alfredo Davanzo, líder de "Segunda Posición", movimiento vinculado a las Brigadas Rojas.

Davanzo fue condenado en 1982 a diez años de cárcel por robo a mano armada y, más tarde, detenido en París en 1998, pero quedó en libertad poco después, tras lo que se encontraba en paradero desconocido hasta ser detenido en febrero de 2007.

Además de los 14 condenados, hay tres detenidos durante la misma operación policial que han sido absueltos: Michele Magon, Alessandro Toschi y Andrea Tonello.

Los condenados pretendían atentar contra la vivienda del entonces líder de la oposición italiana, Silvio Berlusconi, en Milán, y buscaban el secuestro o la extorsión violenta de alguna persona para obtener fondos.

A esa lista de posibles objetivos de atentados se unía el grupo televisivo Sky, propiedad del magnate de los medios de comunicación Rupert Murdoch, y una sede de la compañía energética ENI en San Donato, localidad próxima a Milán.

El Tribunal de Milán dictó además una indemnización de 100.000 euros para el senador del Partido Demócrata (PD) Pietro Ichino, una de las personas en el punto de mira del grupo y que recibió, incluso, amenazas, y de un millón de euros para la Presidencia del Gobierno italiano, que se constituyó como parte civil en el proceso.

Durante la lectura de la condena, los imputados, así como familiares y amigos que asistían a la audiencia, comenzaron a cantar "La Internacional".

Algunos de los asistentes gritaron también "Contra la crisis del imperialismo, guerra de clases por el comunismo" y "Contra el fascismo y la represión, revolución".


Comentario:

Mediante el terrorismo quieren imponer el comunismo.