Pekín y Washington reanudarán el diálogo militar a finales de mes.

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China y Estados Unidos reanudarán las conversaciones sobre asuntos militares y de defensa en un encuentro que se celebrará en Pekín los días 27 y 28 de febrero, según publica hoy lunes el periódico oficial "China Daily".

Se tratará de un diálogo informal, aseguró el portavoz del Ministerio chino de Defensa, Hu Changming, que no detalló los asuntos que se pondrán sobre la mesa durante la reunión.

El anuncio se produce después de que las negociaciones, previstas en un principio para noviembre, se pospusieran entonces tras el anuncio de Washington de vender armas a Taiwán por valor de 6.500 millones de dólares (5.100 millones de euros).

El diálogo militar entre las dos potencias se celebra anualmente desde 1997, pero la decisión del gobierno liderado hasta el 20 de enero por George W. Bush hizo que Pekín lo retrasase.

"La administración de (Barack) Obama ha usado un tono positivo para trabajar con China", declaró a la prensa oficial el contraalmirante Yang Yi, experto de la universidad china de Defensa Nacional.

El anuncio del calendario para el diálogo militar coincide con la próxima visita de la nueva Secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, que llegará a Pekín este fin de semana.

"Esto indica que las políticas de defensa jugarán un papel básico en los lazos bilaterales en un futuro próximo", aseveró Yang.

Expertos citados por "China Daily" aseguraron que las conversaciones militares son las primeras afectadas cuando se tensan las relaciones entre China y Estados Unidos y a la vez son las últimas en restablecerse cuando se normalizan.

"La administración Obama, que ha pedido a Robert Gates que continúe como secretario de Defensa, tiene claro que Estados Unidos y China tienen intereses comunes en las áreas comunes", indicó Luo Yuan, miembro de la oficial Academia de Ciencias Militares de China.

Clinton estará en Pekín entre el 20 y el 22 de febrero para tratar asuntos como la crisis financiera y el cambio climático, aunque Washington aseguró que también abordará los derechos humanos y Tíbet, asuntos especialmente delicados para el gobierno chino.

Washington y Pekín celebran este año los 30 años de vínculos formales, establecidos precisamente después de que EEUU rompiera con la isla de Taiwán, por exigencia de Pekín, que la considera parte de su soberanía.


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