Senado tiene listas las preguntas para Calderón.

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La Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Senado aprobó 50 “preguntas parlamentarias” que serán formuladas al presidente Felipe Calderón, luego del análisis del segundo Informe de Gobierno que envió al Congreso de la Unión el pasado 1 de septiembre.

Con la reforma al artículo 69 constitucional, el Ejecutivo federal no tiene la obligación de acudir personalmente a entregar el Informe, pero sí de responder preguntas por escrito de senadores, que este jueves se prevé sean aprobadas por el pleno.

“Cada una de las cámaras realizará el análisis del Informe y podrá solicitar al Presidente de la República ampliar la información mediante preguntas por escrito”, dice el artículo reformado, que marca un ejercicio inédito en la historia política del país.

Así, en conjunto, al Frente Amplio Progresista (FAP), integrado por PRD, PT y Convergencia, le correspondió presentar casi la mitad de las interrogantes, nueve al sol azteca y seis a cada uno de los partidos que integran este bloque.

El PAN tuvo derecho a 13 preguntas; sin embargo, entregó 81, por lo que hizo una depuración para ceñirse al número; el PRI 10, por seis del Partido Verde Ecologista.

Según el acuerdo, cada bancada debió incluir al menos una pregunta sobre política interior, política exterior, política económica, política social y seguridad pública.

Los temas son variados. PRD y PRI ponen el acento en inseguridad, empleo, legalidad del traspaso de la AFI a la SSP, y cuánto dinero y qué equipo se recibirá por la Iniciativa Mérida.

Otros, como el PT, no dejaron de recordar lo que para ellos fue el “fraude electoral” de 2006, y cuestionaron la participación del Presidente en los comicios; éste fue de los pocos que abordó la reforma energética al preguntar si el gobierno está dispuesto a renunciar a una privatización “encubierta” de Pemex.

En sus nueve preguntas, el PRD pide un informe sobre los casos de 1968 y 1971, además de la llamada guerra sucia; los cambios que tiene pensado hacer el gobierno ante la recesión económica en Estados Unidos; el destino de los excedentes petroleros, y las acciones para apoyar a la población rural.

En sus preguntas, cada una con una introducción a manera de contexto, cuestionan al presidente Calderón sobre el empleo, la metodología que se utilizó para asegurar que mejoró el servicio en el ISSSTE y asuntos relacionados con la política social.

En sus argumentaciones, el PRD acusó al secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, de mentir en su comparecencia, y pide sustentar la legalidad de la PFP, y de la AFI y su traslado a la SSP.

El PRI cuestiona en 10 preguntas la política migratoria, y la participación de México en organismos internacionales como el Consejo de Seguridad de la ONU, los subejercicios en programas, y su impacto en las metas económicas, y por qué manejar programas sociales centralistas.

Asimismo pregunta sobre los cambios que se proponen en materia de competitividad internacional, inversión pública, empleo y salarios, planeación y evaluación del desarrollo, así como bienestar nacional, para lograr las metas comprometidas en el Plan Nacional de Desarrollo.

El PVEM envió preguntas sobre las acciones para contrarrestar actos de corrupción que generen afectaciones al medio ambiente; las estrategias para llevar a cabo una verdadera coordinación de corporaciones policiacas en los tres niveles de gobierno, el ajuste en la AFI y el motivo por el que se canceló el presupuesto federal para carreteras en Chiapas este año.

Comentario:

Sería aún más sano para el país, que el presidente Calderón contestara personalmente las preguntas de los legisladores. Si eso se hace en otros muchos países, ¿por qué no en México?