Poca afluencia en la consulta energética.

Noticia:

Sin incidentes, aunque con fallas de organización y baja afluencia, se desarrolló el domingo en el país la tercera y última etapa de la consulta sobre la reforma energética instrumentada por el PRD, según informes de las dirigencias locales de ese partido.

En Tamaulipas, Fidel Rodríguez Mireles, consejero municipal del PRD en Reynosa, admitió que la gente no respondió por ser “día de compras” en McAllen, además de que la pertinaz lluvia ahuyentó a los electores.

En Tampico, varios trabajadores petroleros intentaron boicotear la consulta provocando un breve altercado en la mesa ubicada en el sector Infonavit Cañada, pero los funcionarios de casilla lograron controlar el incidente.

En Nayarit, el coordinador de logística del PRD, Miguel Arce, admitió que algunas mesas receptoras se instalaron tres horas tarde y otras no recogieron la papelería, mientras que en Jalisco no se instalaron 50 casillas, aunque la dirigencia local dijo que la votación fue “buena a secas”, principalmente en Guadalajara.

En Durango, los responsables revelaron que la mayor parte de las urnas urbanas recibieron en promedio 93 votos y unos 50 las rurales, y en Zacatecas, los integrantes de la Comisión Especial aceptaron que “quizá hizo falta más promoción. En Guanajuato se registró baja asistencia y “mucha apatía”.

En Sonora, un recorrido del corresponsal constató poco interés en acudir a votar, y en Querétaro la vocera estatal del PRD, Lina Salinas, consideró que sólo 20% del electorado previsto votó. En Coahuila, extraoficialmente se estimó que pudieron haber votado unos 20 mil ciudadanos y en Chihuahua la participación fue “regular”.

En Chiapas, la consulta fue organizada por grupos sindicales y brigadas de los Comités de Defensa del Petróleo, sin apoyo del PRD, aunque con “buena afluencia”.

Comentario:

Es evidente que el PRD es un partido ha perdido seguidores y la poca afluencia a esta consulta es un claro ejemplo de ello. Pero en lugar de modificar sus estrategias, los líderes continúan con sus mismas posiciones. Allá ellos, las elecciones del próximo año confirmarán su caída en las preferencias electorales.