Inicia EU “nueva era” con China.

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Durante una reunión con el jefe de Estado y líder del Partido Comunista chino, Hu Jintao, la secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, expresó ayer la confianza de su gobierno en empezar una “nueva era” en las relaciones bilaterales con el gigante asiático.

Durante la última estación de su visita de varios días en la región, Clinton señaló que ambos países cuentan con una base sólida para sus relaciones, pero que “aún hay mucho que hacer”. Estados Unidos y China acordaron ampliar el diálogo bilateral, hasta ahora centrado en temas económicos, a asuntos políticos y relacionados con la Seguridad y Defensa.

La funcionaria agradeció también a China la confianza en los bonos del Tesoro de EU, a pesar de la crisis financiera. El país asiático ha invertido 585 mil millones de dólares de sus reservas de divisas en Estados Unidos y es, con ello, el mayor acreedor del país.

El jefe de gobierno chino, por su parte saludó el hecho de que Clinton visite China en su primer viaje al extranjero. En una reunión con su homóloga china, Yang Jiechi, Clinton indicó además que la cooperación bilateral en temas como la crisis económica internacional y la lucha contra el cambio climático es “estrictamente necesaria”.

Como una señal de la mejora de las relaciones, el Ministerio de Defensa chino anunció también que el diálogo militar entre ambos países se retomará a finales de mes, después de ser suspendido el pasado octubre en protesta por el suministro de armas estadounidenses a Taiwán.

Al igual que lo hiciera en Corea del Sur y Japón, escalas anteriores de la gira de Clinton por Asia, la secretaria de Estado quiere acordar con China las medidas futuras a aplicar contra Pyongyang y conocer qué es lo que los “chinos consideran posible hacer”.

Grupos internacionales de defensa de los derechos humanos criticaron por su parte la declaración de Clinton de que el tema de los derechos humanos en China, Tíbet o Taiwán no debía “interferir” con la discusión sobre la crisis económica, el cambio climático y asuntos de seguridad.

Amnistía Internacional manifestó estar “conmocionada y sumamente decepcionada”, al tiempo que Human Rights Watch criticó que Clinton, con una separación de los derechos humanos de los otros temas, admite una estrategia que Beijing aplicó hasta ahora con éxito. La organización Chinese Human Rights Defenders denunció también que una serie de activistas por los derechos humanos fueron interrogados y puestos en observación, e incluso bajo arresto domiciliario, por la visita de Clinton.


Comentario:


Estados Unidos debería comprobar si de verdad hay violaciones a los derechos humanos en China, porque caería en una contradicción si no presiona, mientras lo hace con paises como Cuba o Venezuela. Haría "mutis" sólo para mantener buenas relaciones con el país asiático.