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El gobierno de la ciudad de México ajustará la regulación de establecimientos mercantiles a la realidad que enfrentan los pequeños negocios, como fondas y tintorerías, luego de que comerciantes y restauranteros pidieran un trato diferenciado al que reciben los llamados antros.
A tres meses de que entró en vigor la nueva Ley de Establecimientos Mercantiles del Distrito Federal, se analizan los pros y contras de los horarios fijados por la autoridad para la apertura y cierre de negocios, pero también los motivos de clausura.
En el marco de la presentación del Programa para la Reactivación de la Economía en la delegación Cuauhtémoc, Francisco Mijares Noriega, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), pidió a las autoridades no poner a los restaurantes al mismo nivel que a los antros en el reglamento de la ley.
Leticia Bonifaz, consejera jurídica y de Servicios Legales del GDF, dijo que los restaurantes han sufrido una serie de afectaciones que no fueron pensadas al momento de elaborar la ley, por lo que se evalúa “qué podemos superar a nivel de reglamento, y qué cuestiones llevarían a una nueva iniciativa ya para plasmarse en la quinta Legislatura”.
Por eso, parte de las acciones que se realizarán en la delegación Cuauhtémoc será la de establecer mesas de regularización para que los establecimientos corrijan lo que les falla sin necesidad de llegar a la clausura y los que ya se encuentran en esta situación puedan recibir la condonación de sus multas.
Dijo que la instrucción del jefe del Gobierno, Marcelo Ebrard, es buscar la manera de cambiar esta situación porque aunque preocupan las cuestiones de protección civil, salud y medio ambiente, “tenemos que ser muy conscientes de que el tema económico es lo más grave por el que ahorita atravesamos”.
Prevén salir del bache económico
Mijares confió en que durante el segundo semestre del año comience a reactivarse la economía en la ciudad: “Sí creo que si son hechos y no palabras, va a ser una forma más fácil de reactivar los negocios que hay en la delegación Cuauhtémoc; ojalá y esto se pudiera hacer extensivo a otras delegaciones”. Por su parte Juan de Dios Barba, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana, destacó que de enero a la fecha se han perdido 65 mil empleos en la ciudad.
Comentó que aunque los sectores de comercio y servicios ya se encuentran en los niveles de actividad previos a la emergencia sanitaria, esto nos quiere decir que se han recuperado las pérdidas generadas por la influenza.
Dijo que las medidas que se han comenzado a tomar en la delegación Cuauhtémoc para recuperar la actividad económica, “también las queremos ver reproducidas en las otras 15 demarcaciones” del DF.
En tanto Juan Herrrera Plata, representante de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) Ciudad de México, recordó que hace unos seis meses alrededor de 30 propietarios de misceláneas, tortillerías, papelerías y otros giros acudieron en busca de ayuda porque sus locales fueron clausurados varios meses a causa de las nuevas disposiciones legales.
Sobre el tema Bonifaz, aseveró: “No podemos seguir pensando en clausurar a una tintorería, a una sastrería, a estos pequeños empresarios que no pueden jamás cumplir del todo con unas reglas que muchas veces se establecen de manera general y abstracta, sin pensar las particularidades que tienen”.
Además hay muchas cuestiones de la ley que tendrán que ser corregidas en el reglamento porque no son aplicables, como el que una pequeña fonda cuente con salida de emergencia, dijo la funcionaria.
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