Obispo Vera alerta sobre estado narco.

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El obispo de la Diócesis de Saltillo, Raúl Vera López, aseguró que “debido a una complicidad de alto nivel, el narcotráfico está conformando su propio estado con funcionarios que reciben sueldo del pueblo y del narco”.

“Se está configurando el estado narcotráfico dentro del Estado mexicano. Ellos tienen más fuerza (en dinero y armas) y no los pueden parar”, advirtió y sostuvo que si la situación no cambia, “en México tendremos un Estado fallido”.

Consideró que “si el presidente de la República, Felipe Calderón, no pide a los líderes de los partidos nacionales que detecten a quienes están implicados en la delincuencia organizada esto no se va a acabar”.

Parece pacto de impunidad

Ayer, el prelado católico señaló: “Parece que existe un pacto de impunidad entre el gobierno y los partidos políticos y por eso no les echan el guante”.

Debe haber investigación de alta inteligencia y persecución y no la hay porque no existe ningún banquero acusado de lavar dinero proveniente del crimen organizado, apuntó.

El jerarca de la Iglesia católica criticó el método con el que el gobierno del presidente Calderón enfrenta al crimen organizado, “porque es una guerra en la que han muerto muchas personas inocentes, niños, mujeres, jóvenes y adultos que nada tenían que ver en el problema”.

Por eso ya son muchas las quejas que se han presentado en la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, por los abusos de los militares, añadió.

El prelado recordó que la comisionada de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas dijo que “la guerra no se gana en las calles sino en los tribunales, por eso hay que investigar y detener a los delincuentes para que ajusten sus cuentas con la ley”.

Pide que tropas dejen calles

Aseguró que “no es con la fuerza bruta como van a terminar con esa lacra”. Exigió que el Ejército deje las calles y regrese a su cuartel, que le asigne esa tarea exclusivamente a la policía, y que el presidente Felipe Calderón cambie la estrategia contra la delincuencia porque la actual ha fracasado.

Así lo muestran tantos “asesinatos salvajes, el secuestro y las desapariciones que son muchas en todo el país, así como la extorsión espantosa de migrantes que ocurre cada día en todas partes”, agregó Vera.

Hay casas “en todos lados” donde tienen a más de 300 indocumentados y los golpean para que den los datos a sus familiares a quienes les exigen dinero para liberarlos, añadió.

En Veracruz, expuso, hay varias casas que se hacen pasar por refugios de migrantes centroamericanos y son sitios de “enganchadores de ilegales”.

Hace poco, comentó, una mujer que opera este tipo de casas fue acusada y la detuvo la policía pero “la soltaron”, no pagó con cárcel su delito porque evidentemente cuenta con protección.

Consideró que son evidentes las complicidades de alto nivel con funcionarios públicos porque los delincuentes menores que están en prisión declaran: “yo nomás obedecí órdenes”.

“Ejemplos hay muchos, la fuga de reos en Zacatecas, la de El Chapo Guzmán que compró voluntades y salió de un penal de Máxima Seguridad (Cefereso) sin ninguna dificultad… que investiguen y los arresten”, insistió el obispo Vera.