Soplan vientos de guerra, alerta Chávez.

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El acuerdo que negocian Estados Unidos y Colombia para la instalación de siete bases estadounidenses en el país sudamericano, ha gene-rado en la región una tensión que va en aumento. El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, alertó ayer, en el marco de la cumbre de Unasur, que la presencia militar estadounidense en bases colombianas “puede generar una guerra en Sudamérica” y afirmó que su país se está preparando porque: “nos tienen en la mira”.

“Vientos de guerra comienzan a soplar”, alertó Chávez, quien se quejó de que esta tercera Cumbre Ordinaria de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur), que se celebró ayer en Quito, no haya incluido en su documento final este asunto.

Oficialmente, el tema de las bases no figuró en la agenda de la cumbre, los mandatarios evitaron condenar el acuerdo que negocian Colombia y EU, la Declaración de Quito no mencionó el tema y, por falta de consenso, no acogió una propuesta de Bolivia de manifestar “preocupación y rechazo” sobre ese caso. En cambio, la declaración final incluyó la creación de cuatro nuevos consejos: de Lucha contra el Narcotráfico, Infraestructura, Educación y Desarrollo. Además consideró una condena al golpe de Estado en Honduras.

El mandatario venezolano insistió en que su país está muy preocupado por el acuerdo que negocian Washington y Bogotá, lo que, dijo, “puede convertirse en una tragedia”. Acusó a Colombia de “seguir las tesis del ataque preventivo” y recordó el bombardeo colombiano de 2008 contra un campamento de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia en territorio ecuatoriano. Advirtió que un acto similar en suelo venezolano provocará “una respuesta militar y contundente”.

Aludió también al golpe de Estado en Honduras y reiteró la tesis de que ciertas fuerzas o sectores de Estados Unidos estuvieron detrás del derrocamiento de Manuel Zelaya. Al respecto apuntó: “Debemos pedir coherencia” al presidente de EU, Barack Obama.

En coincidencia con lo expresado por Chávez, el ex presidente cubano Fidel Castro indicó, en una de sus Reflexiones, que la presencia de militares de EU en bases de Colombia sólo podría servir para que Washington controle las riquezas naturales y evitar los cambios en la región.

Castro calificó de “insulto a la inteligencia” los argumentos usados para el establecimiento de las bases y dijo que la presencia de EU en Colombia podría ocasionar un conflicto con Venezuela y “podrían promover una guerra sucia como hicieron en Nicaragua”.

El presidente de Ecuador, Rafael Correa, asumió la presidencia pro tempore de la Unasur de manos de la mandataria chilena, Michelle Bachelet, y se comprometió a convocar una reunión urgente para dialogar con Colombia, cuyo presidente, Álvaro Uribe, estuvo ausente, sobre el tema de las bases.

Por ofrecimiento de la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, la posible reunión ocurrirá en Buenos Aires.

Brasil pide integración

En este contexto de confrontación con Colombia, el presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, dijo que la Unsaur debe ser un proyecto real de integración y no “un club de amigos rodeado de enemigos”, al tiempo que propuso convocar a EU al diálogo sobre el tema de las bases.

En Quito se acordó una reunión de cancilleres y ministros de Defensa para el 24 de agosto. Colombia adelantó que no asistirá si la cita es en la capital de Ecuador y consideró positivo que en la cumbre no se condenara el acuerdo para las bases de EU.

Ayer, Colombia pidió a Venezuela que “recapacite” en su decisión de no suministrar más gasolina barata a la zona de frontera y anunció que no tomará represalias en el flujo de gas y energía eléctrica a su vecino. Chávez ordenó detener el suministro del combustible, en protesta por el tema de las bases.