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Desde su arribo a México, hace más de 19 años, el sector de franquicias no ha estado blindado las crisis recurrentes, pero ha aprendido a sortearlas a través de reinventarse permanentemente para convertirse en la mejor opción de inversión en tiempos difíciles.
Juan Manuel Gallastegui, presidente de Gallastegui Armella Franquicias, señaló que, a diferencia de los capitales especulativos, las franquicias son creadas con capitales generadores de empleo, donde la gente puede encontrar un refugio para su dinero, con utilidades inmediatas por arriba de las que ofrecen los bancos o algún instrumento financiero, y con menor riesgo.
Son modelos de negocios posicionados con un sistema de operación probado, asistencia técnica y un saber qué hacer experimentado, aseguró el especialista.
Aunque en México el sector franquicias esta todavía en pañales, a diferencia de Europa y Estados Unidos, esta actividad concentra aproximadamente 1.3% del Producto Interno Bruto (PIB) Nacional, y en el mundo, representa un mercado superior a los 80 mil millones de dólares al año, afirmó el expresidente de la Asociación Mexicana de Franquicias (AMF).
Adelantó que lo que se puede ver en los próximos meses, aunque ya están casi todas las franquicias disponibles en México, es la llegada de nuevas ofertas de negocios provenientes de Brasil, España, Estados Unidos, Australia, Nueva Zelanda y alguna otra de países emergentes.
Gallastegui previó que este sector cerrará el año con más de mil 100 franquicias operando en el país, de las cuales 70% serán de origen nacional y 30% extranjeras. "Con lo que nos posicionamos como el séptimo lugar en el ramo de franquicias a nivel mundial", dijo.
La tercera generación
Las crisis financieras exógenas o internas han sido un excelente laboratorio para medir la solidez de la fortaleza del sistema de franquicias mexicano, comentó en entrevista el presidente de Gallastegui Armella Franquicias.
Después de 19 años de trabajo constante con éxitos, surge la tercera generación de franquicias con mejores herramientas para crecer e internacionalizarse, como es el Programa Nacional de Franquicias (PNF), el primero verdaderamente hecho para incentivar el sector.
Este plan de estímulos ofrece mayores alternativas para franquiciante y franquiciador; financiamiento inmediato de hasta 250 mil pesos, asistencia técnica para exportar su modelo de negocios o bien ayudarlos a importar franquicias, sin trámites burocráticos, reconoce.
La tercera generación de franquicias estará indudablemente ligada a las nuevas tecnologías al trato personalizado.
Son aquellas que se preocupan más por la calidad de sus servicios o productos que a la cantidad; aquellas que se esmeran por encontrar el mejor franquiciatario posible, y por ende, cuidarlo ofreciéndole tecnología de punta, asesoría personalizada, contacto permanente en su proceso de operación; con éste se logra la madurez de la franquicia y una relación larga de negocios con alta rentabilidad.
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