Nadie puede condicionar el voto, dice Paredes

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Beatriz Paredes, presidenta nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), llamó a la ciudadanía y militantes de este organismo político a denunciar si algún gobierno condiciona la entrega de programas sociales a cambio de apoyo para algún partido político.

Sostuvo que el PRI ha "volteado la fotografía", pues afirmó que "la gente ya se dio cuenta de que el PAN no sabe gobernar y por eso está ganando el PRI del Siglo XXI que le exige a sus candidatos que si tienen una representación popular sean honrados, honorables y estén plenamente comprometidos".

Así, de gira por Baja California -donde se desarrolla el proceso electoral para elegir a alcaldes y diputados locales- la dirigente partidista subrayó que los programas sociales son patrimonio de todos los mexicanos y es falso que un gobierno los pueda quitar si no votan por tal o cual partido.

En un estado gobernado por el Partido Acción Nacional (PAN), Paredes Rangel pidió a los bajacalifornianos no dejarse amenazar por las autoridades, y avisar si hay pruebas de esas amenazas para que el PRI pueda presentar una denuncia ante la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales (Fepade).

Ante la estructura priísta de Tecate, la dirigente del CEN priísta afirmó -en un comunicado difundido por el CEN del tricolor- que "no vamos a dejar que amenacen y corrompan la libertad ciudadana de los baja californianos.

"Así como ganamos Mérida y empezamos ganando este año, recuperando un municipio que el PRI tenía 20 años sin gobernar, así es el camino de recuperar el municipio más priísta de Baja California", expresó la presidenta del CEN priísta.

Expresó que los priístas "tenemos una gran deuda, la de recuperar Baja California. Es una deuda de honor, de dignidad patriótica y también de afecto y amor con un gran líder, que fue un gran ejemplo para los jóvenes, un ejemplo de limpieza y de idealismo político: Luis Donaldo Colosio".

Criticó a las administraciones panistas de Baja California, con los que el potencial extraordinario de este estado, que podría ser la zona de más alto desarrollo industrial en el país, se quedó frustrado "por la incapacidad de los gobiernos panistas, porque no saben gobernar".

Añadió que los excedentes petroleros que se tuvieron en la pasada administración federal hubieran permitido desarrollar la entidad. "Pero no, no sirvieron para eso, sirvieron para que hubiese altos sueldos de altas burocracias y quién sabe para qué más cosas, porque no logro entender dónde están esos recursos", subrayó.

Yo soy una gente con buena fortuna, expuso la lideresa nacional, y en la etapa en la que los militantes priístas me han dado el honor de conducir al PRI, pasó de ser la tercera fuerza a ser la primera fuerza política en el país.

En Ensenada, dijo que cuando llegó a la dirigencia del PRI se trazó un conjunto de metas, muchas vinculadas a la recuperación de la fuerza priísta y a la posibilidad de que zonas estratégicas del país que se estaban quedando rezagadas ante la incapacidad de sus gobiernos por impulsar su desarrollo, puedan reencontrar su vocación productiva, de crecimiento y de generación de oportunidades.

"De las metas que me planteé cuando tomé posesión del Comité Ejecutivo Nacional, la única que me falta por cumplir es Ensenada, y la vamos a alcanzar el próximo 4 de julio con el triunfo electoral", confió.

Destacó que a Ensenada, el municipio más grande del país, la política electoral no le hizo bien y dividió a sus familias "porque quienes prometieron mucho cuando dijeron que iban a cambiar las cosas después se fueron por el camino fácil y olvidaron sus promesas para más bien acordarse de sus arcas personales".

Recordó que se han obtenido triunfos espectaculares en municipios mucho más difíciles de ganar. Por ejemplo, destacó que después de 18 años el PRI ganó Naucalpan, y después de 20 años obtuvo la victoria en Mérida.