Los conservadores británicos crean un grupo propio en la Eurocámara.

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La creación de un grupo independiente en el Parlamento Europeo por parte de los conservadores británicos debilitará el peso de Reino Unido en la Unión Europea. La nueva formación, denominada Grupo de Conservadores y Reformistas Europeos (GCRE), dedicará sus esfuerzos a "la urgente reforma de la UE sobre la base del eurorrealismo, la transparencia, la responsabilidad y la democracia". La salida de los conservadores británicos del Partido Popular Europeo (PPE), el partido de la derecha europea, significará un alejamiento de su líder, David Cameron, de la gran familia conservadora de la UE, en la que la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Nicolas Sarkozy, marcan el paso.

Los británicos, a través del PPE, habían multiplicado su influencia política en asuntos como la legislación laboral y financiera, y en cuestiones de libertad y justicia, donde han cosechado importantes opting-outs (excepciones). Por eso, la decisión de los conservadores británicos resulta bastante incomprensible desde Bruselas.

El nuevo grupo estará constituido por 55 diputados y será el cuarto por dimensión en la Eurocámara. Al mismo todavía se podría sumar algún diputado más. Los tories británicos ejercerán un liderazgo indiscutible con sus 26 europarlamentarios. Además, se integrarán en esta formación los 15 diputados del partido Ley y Justicia, de Jaroslaw Kaczynski, ex primer ministro polaco y hermano del presidente Lech Kaczynski. También se unirán nueve diputados del partido Democracia Cívica de la República Checa, liderado por el ex primer ministro Mirek Topolanek (véase recuadro).

"Tenemos participantes de ocho países pero todavía continúan las conversaciones y creemos que más se verán atraídos y se incorporarán a nuestras filas en un futuro próximo", ha señalado Mark Francois, ministro en la sombra para Europa de Reino Unido. La fuga de los conservadores británicos desluce la amplia victoria que obtuvo el PPE en las pasadas elecciones. Ayer, los diputados conservadores reeligieron a Joseph Daul como presidente del grupo, formado por 264 diputados. Jaime Mayor Oreja fue elegido vicepresidente. Los socialistas pasarán a denominarse Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas, dando así satisfacción al Partido Democrático de Italia, que aportará sus 22 diputados. Será la segunda fuerza política, con 183 diputados. Martin Schulz fue elegido presidente y anunció que sus prioridades serían "garantizar una mayor justicia social en Europa, más democracia y proteger la dignidad humana ante el alza de los extremistas en el continente".

El tercer y quinto grupo en importancia serán los liberales y los Verdes con 80 y 53 eurodiputados, respectivamente. La extrema derecha y los antieuropeos pugnan por formar un grupo independiente, para lo que necesitan como mínimo 25 diputados de siete países distintos.