La hora del adiós.

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En tanto la muerte del cantante Michael Jackson ha conmocionado al mundo, las hipótesis de la causa de su fallecimiento ya se barajan en todos los portales y medios de comunicación. La más fuerte es la que habría sufrido un infarto a causa de una sobredosis de morfina.

El nada sutil portal TMZ.com, a quien hay que darle el crédito de haber transmitido la primicia de la muerte del cantante, abrió ayer el día con la leyenda: FUE EL DEMEROL, así, en letras-catástrofe.

El artista que siempre se creyó Peter Pan y cuyo exceso de gastos o mala administración lo forzaron a desprenderse de sus valiosas posesiones, había emprendido una batalla contra su debacle personal y profesional, comprometiéndose a realizar 10 conciertos en Londres, que iban a significar su retiro de la música.

“De verdad, después de esto ya no habrá más”, dijo Michael en su última conferencia de prensa. Quién sabe cuánto le costó el esfuerzo de tener que levantar su propio imperio de las ruinas.

El médico personal de Jackson, Conrad Robert Murray, acompañó al cantante en el momento de su deceso, por lo que tendráque prestar su declaración a la policía.

El doctor fue buscado durante varias horas y se sospecha que habría sido él quien aplicó al artista la inyección que le habría ocasionado la muerte.

De acuerdo con información difundida por agencias, y recogida por TMZ.com, el 911 recibió una llamada a las 12:21 horas del jueves, desde la casa de Michael Jackson en Holmby Hills, California.

La persona que hizo la llamada decía que Jackson no respiraba y estaba inconsciente. Además en la llamada detallaba que Michael no respondía a los primeros auxilios. Quien llamó dijo que el doctor en escena (Dr. Conrad Murray) era el único testigo.

La hipótesis de una “sobredosis de medicamento” creció, cuando familiares de Michael Jackson aseguraron ayer que el cantante recibió “una gran dosis de morfina” e incluso se reveló que el padre del artista, Joe Jackson, quiso llevar recientemente a su hijo a un centro rehabilitación en Palmdale (California), por lo que él consideraba una “adicción” a los fármacos con prescripción médica.

Otros integrantes de la familia Jackson dijeron que el cantante no estaba preparado para actuar en Londres.

De hecho, representantes de esa gira, que estaba prevista que comenzara el 13 de julio, comentaron a TMZ.com, que Jackson se encontraba generalmente en estado “letárgico” y llegaba tarde a los ensayos.

Por su parte, Brian Oxman, amigo personal de Michael Jackson y abogado de la familia del cantante, señaló el jueves: “No conozco la causa de todo esto, pero es algo que temía. Esto es un caso de abuso de medicamentos, salvo que la causa sea otra”.



Las investigaciones

Los investigadores forenses revelaron ayer que los datos completos de la autopsia al demorarán días e incluso semanas.

Sin embargo, aseguraron que apenas se conozcan los resultados de los exámenes forenses, se informará la verdad sobre la causa de la muerte de Michael Jackson, dejando en claro que no se ocultará información en torno a su deceso.

El médico forense del Condado de Los Ángeles dijo el viernes que la autopsia en el cuerpo de Michael Jackson terminó, pero para saber la causa de la muerte habrá que esperar de cuatro a seis semanas.

Por otra parte, el jefe de investigaciones Craig Harvey dijo a periodistas en conferencia de prensa que no había evidencia de un trauma externo en el cuerpo del artista o acto criminal asociado al fallecimiento.

Al tiempo que los médicos y la policía local trabajaba en encontrar las causas de la muerte del astro del pop, Lisa Marie Presley, quien durante dos años fue su esposa, manifestó en su MySpace que “Michael Jackson era un alma torturada” y que alguna vez le confesó que terminaría como Elvis Presley (su padre).

Tras la muerte de Michael Jackson y una investigación abierta bajo la sospecha de abuso de medicamentos, la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) aprovechó para advertir al mundo que el abuso de medicinas representa un serio riesgo para salud pública y la seguridad al provocar muertes accidentales.

El forense encargado del caso, Lakshmanan Sathyavagiswaran, requirió más análisis toxicológicos para dar con la causa exacta del fallecimiento.