Neuropatía, una pesadilla global.

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El objetivo de la medicina es curar todo mal, sin olvidar aliviar el dolor, como el producido por las neuropatías, que hace blanco en cerca el 50% de los más de siete millones de mexicanos que padecen diabetes, nos informa el doctor Jorge Aldrete Velasco, Secretario de Actividades Científicas del Colegio de Medicina Interna de México.

Explica que una neuropatía es la afectación de los nervios periféricos, sensitivos o motores. "Se trata de una complicación que si no es identificada a tiempo puede llevar a la amputación de la pierna o el pie".

Las lesiones en nervios periféricos, como resultado de una disminución del flujo sanguíneo, y los altos niveles de glucosa en la sangre, son señales de neuropatía diabética, que suele aparecer en pacientes mal controlados con más de cinco años de enfermedad.

Mal y de malas

En una persona con diabetes, la elevación en los niveles de azúcar o glucosa sangre incrementa la producción de radicales libres de oxígeno, que dañan los nervios periféricos y ocasionan, principalmente en pies y piernas, trastornos circulatorios como pesadez, hormigueo y adormecimiento.

Provocan también alteraciones de la sensibilidad, debilidad y atrofias musculares que dificultan el correcto apoyo de las extremidades al caminar.

"La pérdida de sensibilidad en los tobillos y planta de los pies produce inflamación, destrucción ósea y una deformidad de las articulaciones llamada enfermedad de Charcot", dice el doctor Aldrete Velasco.

Y, precisa, "cualquier herida leve facilita la aparición de llagas, úlceras profundas e infecciones que pueden desencadenar un cuadro de gangrena y, con ello, la necesidad de sufrir la amputación del miembro afectado".

Las estadísticas son alarmantes. En el mundo cada tres segundos se lleva a cabo una amputación debida a pie diabético, en México se cercena a 78 pacientes diariamente.
Esto se debe a que en muchas ocasiones, el paciente con neuropatía diabética no percibe alguna lesión en los pies debido a la pérdida de sensibilidad; o bien, si la detecta, tampoco presta atención porque carece de molestias severas.

Para prevenir el riesgo de amputación y facilitar la atención oportuna de la neuropatía diabética, se emplea una herramienta diagnóstica para la autoexploración e identificación de los signos y síntomas, desarrollada por el doctor Germán Vargas Ayala.

"A partir de un cuestionario de doce sencillas preguntas, las personas con diabetes pueden identificar con gran facilidad la presencia de neuropatía diabética en manos, pies y piernas. De resultar positivo, les permitirá acudir de inmediato con su médico para que ratifique el diagnóstico e inicie el tratamiento más adecuado", dice.

Mejor atención

Subraya que "es importante que (los pacientes) revisen diariamente sus pies descalzos para detectar la presencia de manchas rojas, cortaduras, ampollas o cualquier otro signo de alarma, ya que la prevención y el tratamiento integral de la diabetes pueden hacer la diferencia entre el camino hacia su salud o detener su paso por culpa de una amputación".

El doctor Jorge Aldrete Velasco, advierte que la piedra angular en el manejo integral del paciente con diabetes es un adecuado control de los niveles de glucosa, lo que previene complicaciones como la neuropatía, la nefropatía y la retinopatía diabéticas.

Pero si la persona ya tiene afección neuropática, se sugiere administrar medicamentos dirigidos a disminuir el problema desde sus causas, como el ácido tióctico (Thioctacid), un fármaco miembro de una red de antioxidantes naturales que neutraliza radicales libres responsables del daño celular.

El especialista dice que estudios internacionales como el SIDNEY (Symtomatic Diabetic Neuropathy), el cual evaluó en 120 pacientes la eficacia y seguridad del ácido tióctico, reportan que esa sustancia reduce los signos y deficiencias neuropáticas, tales como hormigueo, ardor, dolor punzante, atrofias musculares y alteración de la sensibilidad. Además, favorece el incremento del flujo vascular en los nervios afectados.

Comentario:

Sólo empeora una persona cuando no se cuida. Siempre es mejor prevenir que lamentar.