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El papa Benedicto XVI pidió ayer a los fieles que sean “intransigentes” con el pecado, pero “indulgentes” con las personas, durante la oración del Ángelus que celebra cada domingo asomado a la Plaza de San Pedro desde la ventana de su residencia.
Este fue el consejo que dio el Pontífice al referirse a la parte del Evangelio que habla de la adúltera apedreada por el pueblo y en la que Jesucristo pronunció la frase: “El que esté libre de pecado que tire la primera piedra”.
“Tenemos que aprender a ser intransigentes con el pecado, comenzando por los nuestros, e indulgentes con las personas”, añadió Joseph Ratzigner, quien invitó a los fieles a “aprender de Jesús y no juzgar y condenar al prójimo”. Este mensaje llega un día después de la publicación de la carta pastoral enviada por el Papa a los católicos irlandeses ante los casos de pederastia por parte del clero en ese país.
Una misiva en la que Benedicto expresa “vergüenza y remordimiento” por lo ocurrido y muestra su “consternación” por el sufrimiento de las víctimas. Acusa a los religiosos culpables de haber “traicionado” la confianza de los jóvenes y sus familias.
En los mensajes en varios idiomas que Benedicto XVI dirige tras el rezo del Ángelus, pidió a los fieles que invocaran el “perdón con humildad por los errores cometidos” y “fuerza para crecer en la santidad”.
Piden registro central
Aunque el Papa no mencionó ayer la criticada política del Vaticano de cubrir los abusos con un manto de secreto, Martin Werlin, titular de la abadía benedictina de Einsiedeln, llamó ayer mismo a la Santa Sede a establecer en el Vaticano un registro central de clérigos que hayan cometido abusos a menores, a fin de evitar que los obispos sigan cambiando a los sacerdotes pederastas de país a país.
El clérigo suizo criticó al Papa y a obispos por sus reacciones al escándalo: “Temo que la cúpula de la Iglesia en Roma no toma la situación lo suficientemente en serio”, dijo Werlin, según con el semanario SonntagsBlick. En Alemania, en tanto, la revista Focus informó que el jefe de la Conferencia de Obispos del país, el arzobispo Robert Zollitsch, admitió que la Iglesia católica encubrió a sabiendas casos de abuso sexual. Zollitsch, arzobispo de Friburgo, dijo que aunque la mayoría de los casos se registró fuera de la iglesia, “agresiones que ocurrieron en tales números en nuestras instituciones me avergüenzan y me asustan”.
“Cada caso oscurece el rostro de toda la Iglesia”, dijo Zollitsch, quien se disculpó por el encubrimiento de un caso de abuso sexual hace 20 años en la Selva Negra, cuando estaba a cargo de recursos humanos en la diócesis.
El Vaticano decidió abrir una serie de canales en Twitter para dar a conocer las principales medidas adoptadas por el Papa contra la pederastia clerical.
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