Explosión mata a 101 en Rusia.

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Una explosión, causada al parecer por fuegos artificiales, dejó la madrugada de ayer al menos 101 muertos en un club nocturno en la ciudad rusa de Perm, informaron medios locales.

La agencia estatal RIA Novosti citó a funcionarios del Ministerio de Emergencias, quienes dijeron que la causa de la tragedia fueron los juegos pirotécnicos, pero no especificaron si los explosivos estaban almacenados en el club nocturno, The Lame Horse, o fueron usados como parte de un espectáculo como el que causó un incendio que mató a 100 personas en un centro de rock en Rhode Island, Estados Unidos, hace seis años.

Los funcionarios señalaron que fueron recuperados 101 cuerpos y que hay 140 personas hospitalizadas —84 de ellas se encuentran graves—, según indicaron autoridades de salud. Se estima que había 233 personas en el lugar con motivo de una fiesta dada por los dueños para festejar los ocho años del local.

“La mayor parte de las muertes se debieron a quemaduras o inhalación de gas”, señaló RIA Novosti citando a Vladimir Markin, un vocero de la principal agencia investigadora de Rusia, quien agregó que, “además de esto, hubo un aplastamiento a la salida”.

La mayoría de las víctimas presentan quemaduras e intoxicación por monóxido de carbono, agregó Markin.

“No estamos hablando de un ataque terrorista sino de un fallo en el cumplimiento de las regulaciones de fuego”, dijo la agencia de noticias ITAR-TASS, tras citar al portavoz de la unidad investigadora de la fiscalía general.

El funcionario añadió que ya se inició una investigación criminal para deslindar responsabilidades por lo ocurrido.

Temor a un atentado

Rusia ha estado con los nervios a flor de piel desde el ataque con bomba de la semana pasada al prestigioso tren de pasajeros Nevsky Express entre Moscú y San Petersburgo, que mató a 27 personas. Fue el primer ataque terrorista fatal fuera de las conflictivas repúblicas caucásicas de Rusia desde 2004.

Rebeldes chechenos se atribuyeron la responsabilidad de ese atentado.

Dmitry Peskov, vocero del primer ministro ruso, Vladimir Putin, anunció que dos aviones equipados para transportar personas con quemaduras graves ya fueron enviados a Perm y que funcionarios del gobierno también se dirigían ya a la zona para evaluar la situación.

Perm, con alrededor de un millón de habitantes, se ubica mil 200 kilómetros al este de Moscú, en los Montes Urales.

La aplicación de reglamentos contra incendios en Rusia es notoriamente negligente y en años recientes han ocurrido varias conflagraciones catastróficas en instalaciones para atención de drogadictos y edificios de apartamentos.

En Rusia se registran aproximadamente 18 mil muertes por incendios anuales, una cifra que supera por mucho el promedio per cápita de Estados Unidos y otros países occidentales.

En agosto, una explosión en la mayor central hidroeléctrica del país mató a unas 77 personas.

Frente a las críticas, el gobierno anunció que revisaría las condiciones de otras instalaciones similares.