Proponen impuesto de 2.5% a recibo de agua.

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La Secretaría de Medio Ambiente del Distrito Federal anunció que el gobierno capitalino busca retomar la creación de un impuesto ecológico, que se incluya en el recibo del cobro de agua, para todos los consumidores en la ciudad.

El dinero que se recaude sería destinado al pago por servicios ambientales que produce en las áreas de suelo de conservación.

Martha Delgado, titular de esa dependencia, dijo que la propuesta es subir 2.5% del costo del líquido sin importar que los usuarios reciban o no subsidios.

Después de que el secretario de Finanzas, Mario Delgado, pidiera a los diputados locales la reestructuración de los cobros, la SMA aseguró que la eliminación de los subsidios es sólo una parte de la propuesta de la administración local para cobrar el agua.

La medida complementaria es la creación del impuesto ecológico de 2.5% para pagar a los propietarios del suelo de conservación del Distrito Federal los servicios ambientales que prestan. Martha Delgado consideró que este aumento de la tarifa debe ser generalizado porque todos los capitalinos reciben los beneficios de las zonas ecológicas.

Argumentó que el incremento que se propone no afecta la economía familiar al representar un aumento mínimo. Por ejemplo, en una facturación bimestral de 100 pesos, el impuesto sería de dos pesos con 50 centavos.

La propuesta de las autoridades locales deberá ser enviada a la Asamblea Legislativa del DF para su aprobación.

Martha Delgado confió en que los diputados estarán en favor de esta medida debido a los problemas de escasez de agua que enfrenta la ciudad de México.

Destacó que una de las principales formas de enfrentar la crisis hídrica es proteger el suelo de conservación, donde se recargan el acuífero, además de usar las barrancas como grandes “ollas” para captar agua, en lugar de pensar en obras hidráulicas.

Con sólo lograr el rescate de la barranca Tarango se podrían recargar casi un millón 230 mil metros cúbicos de agua a los mantos acuíferos, pero el problema es que al no ser visibles, la gente les resta importancia, dijo.

El impuesto ecológico es un proyecto que el gobierno capitalino ha impulsado desde hace un par de años. La anterior legislatura de la ALDF lo rechazó por considerar que era un duro golpe al bolsillo de los capitalinos.